PEREZ17102022

ANÁLISIS A FONDO
Todo tiene un final, feliz o infeliz
Francisco Gómez Maza

Periodistas molestos por el jaqueo de sus cuentas
La incertidumbre reina en los pasillos del Senado


Ciudad de México.- Parece que, por fin, después de seis meses de no pulsar las teclas de mi ordenador, impedido por dolorosos padecimientos devenidos de la Covid-19, ayer estuve de visita en el Senado de la República para constatar que estoy listo para el ajetreo que todo periodista despliega para conseguir “la nota”, para intentar dejar el encierro de la casa y volver a ser testigo de la vida pública del país, en el que se debaten los intereses desde los más patrióticos hasta los más infames y unos y otros pueden pulsarse en un corrillo reunido en el Patio del Federalismo del Senado de la República, o en los sótanos destinados para los periodistas que cubren las actividades de la LXV Legislatura del Senado.

Para empezar floja, muy floja, casi sin sentido estuvo la sesión, tanto que dio para reunirse entre reporteros y columnistas para refritear la vida del reportero, hablando, comentando, verdades, verdades a medias, mentiras, mentiritas y mentirosas de las que circulan en el ambiente político en momentos en que los partidos políticos van y vienen conformando sus listas de candidatos para las gubernaturas en juego, para las cámaras de diputados y senadores, para los congresos locales o para las presidencias municipales que estarán en disputa, mientras afuera del bodrio arquitectónico que ocupan los padres de la patria, la cotidianeidad de la vida sigue sin novedades, con una que otra explosión violenta articulada por la delincuencia, y los políticos tradicionales que sueñan con llevar a la cárcel a los miembros del gobierno de AMLO, atribuyéndoles delitos hasta relacionados con el ilícito comercio de los narcóticos que, bien pagados en los mercados del crimen, en Estados Unidos, quizá la sociedad humana más consumidora de estupefacientes, enriquecen a quien busque la vida salvaje de los productores y comercializadores de por lo menos marihuana.

Pero el poder legislativo tiene que cumplir su cometido y cerrar el sexenio lopezobradorista aprobando o rechazando las iniciativas presidenciales que están en estudio, análisis y discusión en el Poder Legislativo para que sean aprobadas todas por las bancadas y grupos del partido del Presidente, cosa que va a estar en la cola de un venado porque, siendo lo último de la administración del tabasqueño, muchos legisladores incómodos, no sólo de la oposición pripanista, se harán de la vista gorda a la hora de votarlas, aunque hay confianza entre las cúpulas lopezobradoristas de que las reformas saldrán al final del día de este periodo de sesiones legislativas.

Se ve en los corrillos del Senado, antes se decía en los pasillos, que todos tienen la razón, que los del PRI, los del PAN, los de MC y, principalmente los morenistas, van a salir airosos al terminar el sexenio lopezobradorista. Pero, después de una vida periodística de poco más de 60 años, vemos que siempre es lo mismo al final de cada sexenio. Todo parece indicar que habrá cambios profundos con la llegada de Claudia a Palacio y tiene que haberlos principalmente en el manejo de la comunicación, de la información. No sólo los hampones del periodismo están muy enojados con esa política. También entre los profesionales de prensa profesionales hay descontento con el manejo que han hecho los oficiales de prensa, encabezados por Jesús Ramírez Cuevas. Muchos periodistas, cuyos nombres y datos personales fueron recientemente jaqueados de las computadoras de presidencia, están preocupados por lo que les pueda ocurrir.