PEREZ17102022

El combatiente Octavio Leal Moncada
Héctor Escamilla Lira

Él encabeza en Tamaulipas la “Columna Cívica General Pedro J. Méndez”

“ARTÍCULO 18.- Todos los habitantes del Estado estarán obligados:
VII.- Tomar las armas en defensa del pueblo en que vivan
cuando éste fuere amagado por partidas de malhechores.”

Artículo de la Constitución Política del Estado de Tamaulipas,
derogado por Cabeza de Vaca en 2016

Monterrey.- La formación familiar, en la escuela, en lo social y profesional, basada en el trabajo, la disciplina y el respeto al fruto obtenido a base de esfuerzo, hacen de Octavio Leal Moncada una persona que se une a los movimientos espontáneos que surgen tratando de corregir una injusticia social y presto a la masificación: posee un don de liderazgo natural

Llega de su natal Hidalgo, Tamaulipas a Monterrey, a finales de la década 1950 a estudiar en la Universidad de Nuevo León, Facultad de Derecho Generación 1960 -1965, Monterrey polo de desarrollo económico que absorbía grandes cantidades de población.

El gran desarrollo de las fuerzas productivas, después de la Segunda Guerra Mundial, debido de la incorporación de los grandes avances científicos a la tecnología en la producción de mercancías y servicios, trae como consecuencia que grandes capas de la población emigren del campo a las ciudades: algodón, ixtle, candelilla son desplazados por la petroquímica. Atrás queda el fogón, la familia numerosa como unidad económica, la fragua, etcétera. El capitalismo subsume todas las actividades económicas y las concentra en la ciudad.

Octavio llega a una Universidad con menos de 8000 estudiantes, donde el Gobernador designa Rector y Directores de Facultades en donde se aplica un remedo de examen de admisión, de los aspirantes el 60% que ingresa es por ser hijo de funcionario o de empresario y solo se evalúa a un 40%; una universidad que genera mecanismos de depuración estrictos para mantener un gremio profesional elitista, integrando a la currícula materias, como Derecho Romano en latín o el Código Napoleón en francés y así expulsar alumnado al no aprobar una materia en su “tercera oportunidad”.

Inquieto como es, se une al equipo de Futbol Americano, socializa y se integra a la lucha universitaria a través de Juventud del Partido Comunista de México, haciendo propios los reclamos generales de aumento de cupo, pase automático, cuarta oportunidad, respeto del idioma español, impugnando directivos y profesores nefastos, aumento de presupuesto a la UNL, etc. Y pronto será uno de los lideres estudiantiles de esa generación de universitarios.

Empieza su actividad como abogado al lado del Lic. Rolando Guzmán Flores, Adolfo Fraire, Roberto Valero en donde la gente concentrada en la ciudad necesita y reclama trabajo, vivienda, servicios de agua, trasporte, energía eléctrica, capacitación para el trabajo, educación, etc., a su vez la gran oferta de fuerza de trabajo abarata el salario; los especuladores de terrenos y comercio se multiplican; florece el comercio callejero: los mismos problemas fomentan el descontento, la movilización social, la represión ante la incapacidad de darles soluciones y dan pie al fortalecimiento de la organización social y política, ahí lo encontramos asesorando multitud de movimientos de huelga, litigando asuntos laborales individuales; como dirigente de la Central Independiente de Organizaciones Populares (CIOP), que en la década de 1960, impidiera fueran desalojados los habitantes de la Loma Larga y de cientos de predios por los especuladores de terrenos; asesorando la Unión de Comerciantes Primero de Mayo que exige respeto a la legitima actividad de los comerciantes ambulantes; así como participando en las campañas electorales del Frente Electoral del Pueblo, que postulara al Profesor de Ramón Danzós Palomino a la presidencia de la República en 1964; de la candidatura independiente “Círculo Rojo” del Dr. Máximo de León a la gubernatura del Estado y de Oscar Guajardo a la presidencia municipal Monterrey en 1967. La crisis del Partido Comunista Mexicano de los años 69 y 70, hacen que se concentre en su actividad de litigante sin dejar de ejercer una influencia en el movimiento social.

Una fuerte embestida de funcionarios y empresarios regios que le inventan delitos y problemas de carácter familiar hacen que Octavio Leal Moncada vuelva a su pueblo natal a atender la actividad ganadera, que ha sido el sustento histórico de la familia Leal Moncada; ahí le sorprende en 2010, una invasión de hombres armados del grupo de la delincuencia organizada denominado “Los Zetas”; se apoderan de la presidencia municipal, atentan contra la vida, la integridad física, el patrimonios e imponen la ley del más fuerte; Octavio, abogado de profesión, convoca a los habitantes de Hidalgo, Villagrán y Mainero para enfrentar unidos y organizados, porque en forma individual no van a poder hacerlo, y al amparo del artículo 18 de la Constitución Política del Estado de Tamaulipas, que textualmente dice: “Todos los habitantes del Estado estarán obligados: VII.- Tomar las armas en defensa del pueblo en que vivan cuando éste fuere amagado por partidas de malhechores”. Ni más, ni menos, así surge la Columna Armada General Pedro José Méndez.

Durante todo el sexenio 2011-2016, Egidio Torre cubre formalmente la titularidad del Ejecutivo del gobierno de Tamaulipas, quienes realmente ejercen el poder es la delincuencia organizada, en todo ese tiempo la región centro del Estado de Tamaulipas lucía como una franca zona de guerra: Edificios destrozados; viviendas quemadas; los jornaleros abandonan sus actividades agropecuarias; los ranchos y fincas campestres abandonados, muchos se convirtieron en campamentos de delincuentes; comercios cerrados o quemados.

No hay que olvidar que la Columna Armada General Pedro José Méndez, bautizada así en honor al General Republicano y Juarista, oriundo del municipio de Hidalgo, Tamaulipas, fue constituida como una respuesta al infierno que pasaron sus habitantes en 2010, cuando el grupo de la delincuencia organizada denominado “Los Zetas”, “toma las plazas”.

A finales de 2015 surge un rayo de esperanza, cuando la alianza PAN-PRD postulan al Lic. Francisco García Cabeza de Vaca para la gubernatura de Tamaulipas. El PRI se había convertido en el sostén político de bandidos, malhechores y delincuencia organizada. La población tamaulipeca harta de tanta corrupción e inseguridad se volcó por el cambio. A ese movimiento cívico se unió la Columna Armada General Pedro José Méndez y apoyo la campaña del Lic. Francisco García Cabeza de Vaca: el triunfo fue contundente.

Sin embargo, la ilusión pronto dio paso a la realidad. El nuevo gobierno integrado por ese tipo de políticos demagogos y pragmáticos, surgidos del grupo de Diego Fernández de Ceballos y Lozano, que desplazaron a los ideólogos panistas, utilizando el PAN solo para hacer fortuna, controlando “el camino del dinero y del poder”, uniéndose a la delincuencia organizada, por lo tanto, el “nuevo gobierno”, seguía siendo más de lo mismo. Francisco García Cabeza de Vaca con mucha hambre de poder y de dinero, usó en su beneficio, el descontento del pueblo.

En 2018 se abre otra esperanza: Andrés Manuel López Obrador y su movimiento Morena cautivan a la población tamaulipeca y a la Columna se trasforma en Columna Cívica General Pedro José Méndez. Las consecuencias políticas son expresadas de inmediato por el gobierno de Francisco García Cabeza de Vaca, quien emprende una campaña de difamación y calumnias contra Octavio Leal Moncada, los funcionarios municipales de la zona centro y de los líderes de la Columna Cívica General Pedro José Méndez, consistente en falsas acusaciones de homicidios, de trata de personas, de trasiego de armas y narcóticos, etcétera, y se emiten cientos de órdenes de aprehensión.

En 2022, la Columna Cívica General Pedro José Méndez se identifica con la candidatura a la gubernatura del Estado de Tamaulipas del Dr. Américo Villarreal Anaya, abanderado de Morena, con lo que se intensifica el conflicto político entre Francisco García Cabeza de Vaca y Octavio Leal Moncada.

Francisco García Cabeza de Vaca utiliza en su campaña de calumnias, mentitas y desprestigio al periódico El Norte, ese vocero de la oligarquía más rancia y doble moral que se tiene su asiento en Monterrey y que tiene un origen común con las oligarquías de Coahuila y Tamaulipas su capitalización en el periodo de la “ley seca gringa”. Tuvieron la suerte de contar con una pequeña empresa cervecera que pudo abastecer la demanda del vecino.

Esa misma oligarquía que no perdona, que en la década de 1960, Octavio Leal Moncada que junto a Rolando Guzmán, José Luis Sustaita de los Reyes, Oscar Guajardo, Tony Guajardo, Mario Curzio, Máximo de León Garza y otros organizarán a los vecinos de la Loma Larga, en la Colonia Independencia, para frenar la orden de desalojo masivo otorgado por un juez civil (en la Loma Larga ya existía un proyecto habitacional gran burgués, desde donde simbólicamente tendrían a Monterrey en sus pies), y sirvió de imán a decenas de asentamientos irregulares se unificaran en la Central Independiente de Organizaciones Populares (CIOP) y se organizaran los vendedores ambulantes en la Unión de Comerciantes Primero de Mayo.

La campaña de la yunta Francisco García Cabeza de Vaca y el periódico El Norte en contra de Octavio Leal Moncada y de Morena es totalmente explicable, y su trasfondo político es evidente: trae como consecuencia el que desde el 5 de julio de 2022, al 29 de noviembre de 2022, se privara ilegalmente de la libertad a Leal Moncada, siendo absuelto totalmente de los hechos imputados por el gobierno espurio de Cabeza de Vaca.

Ahora ocupa físicamente de nuevo su lugar en la Columna Cívica General Pedro José Méndez y se ha echado a cuestas la tarea de recorrer el Estado de Tamaulipas, exhortando a la ciudadanía a apoyar al candidato presidencial en el 2024 que continúe el conjunto de proyectos iniciados por el gobierno de la Cuarta Transformación.