Fin de las cucarachas políticas
Nora Elsa Valdez

Monterrey.- Está llegando el fin de las cucarachas políticas que nos han invadido. Como el común denominador de los malos políticos es decir mentiras y hacer lo contrario de lo que prometen, éstos van a ser exterminados cuando se conozca la verdad detrás de sus mentiras.

Cuando llega la luz de la verdad, la obscuridad de las mentiras se disuelve. Ante una verdad, una mentira no se puede seguir sosteniendo. Conocer la verdad sobre la vida y los hechos de candidatos y partidos, puede ser la mejor herramienta en estas próximas elecciones para saber si hay alguien digno de confiarle el futuro de México.

¿Cuánto tiempo llevamos los mexicanos creyendo las mentiras que los malos políticos nos prometen en cada campaña? Curiosa y extrañamente, cada gobernante en turno, al llegar al poder hace todo lo contrario de lo que prometió. Es como el mundo al revés, pues los diarios discursos de los políticos festejando los avances y éxitos de nuestro país, no coinciden con la dolorosa y precaria realidad que vivimos.

Esa realidad es como un infierno sin salida, en el que cada día nuestro pueblo se hunde más en el sufrimiento y la desesperación, y no entendemos dónde está la trampa, pues el discurso de los políticos habla de prosperidad y abundancia. Estos políticos más bien parecen magos prestidigitadores que nos hipnotizan con sus mentiras y no podemos descubrir el truco.

¿Cómo es que las promesas vanas de las campañas en las que se despilfarran millones, después de las votaciones se convierten en enormes endeudamientos de los gobiernos estatales y federales; o en obras multimillonarias inútiles como la Estela de Luz; o en sueldos ofensivos de diputados, senadores y dirigentes políticos en el poder; o en cambios clandestinos a nuestras leyes en nuestro perjuicio, y luego nadie encuentra a los culpables?

¿Cómo es que no hay dinero para las necesidades básicas del pueblo y hay miles de millones que se gastan o desaparecen sin que nadie sepa qué se hizo con ese dinero?

Necesitamos encontrar el truco, la trampa, y esto se logra únicamente buscando la verdad. Si lo que vemos y vivimos no coincide con lo que los magos prestidigitadores nos dicen, tenemos que encontrar dónde está la mentira y cuál es la verdad detrás del truco.

Tenemos que darnos cuenta de que sólo ciertas especies depredadoras, como las víboras, tienen el poder de hipnotizar. Sólo quien quiere engañar, hipnotiza. Las serpientes hipnotizan a sus presas para alimentarse con ellas, y esas presas no se dan cuenta del influjo que el depredador utiliza para atraparlas y por eso caen en sus garras.

La trampa es el engaño. El mago nos “duerme” para que no podamos entender qué sucedió, para que creamos que es real algo que es mentira. Ya es tiempo de darnos cuenta de que la clase política en el poder, desde hace mucho tiempo está hundiendo a México gracias al hipnotismo, a las mentiras que nos cuenta cada período electoral.

Las mentiras duran hasta que descubrimos que el mago es solamente un ser humano de carne y hueso como nosotros, con la única diferencia de que aprendió a mentir y a engañar a los demás, a hipnotizar como las serpientes. Esos magos ya están siendo descubiertos por una sociedad que despierta, y en un último intento desesperado para no verse descubiertos están usando sus últimos recursos, como las amenazas de muerte, huir al extranjero, o la descarada publicación de decretos para prohibir la revisión de los documentos que son prueba de sus delitos.

Las cucarachas que han invadido el gobierno de México, los malos políticos magos prestidigitadores, desaparecerán porque está saliendo a la luz la verdad y se están encontrando las pruebas de sus mentiras.

Está llegando el fin de los magos cínicos y malvados, pues todo cae por su propio peso.

Ha llegado la hora de que todos conozcamos la verdad detrás de sus trucos.