CRÓNICAS PERDIDAS
La Inmaculada
Gerson Gómez

Monterrey.- Tú, mi Concepción perenne: la forma de perdonar al mundo. Mi Inmaculada, dogma cristiano, asegurando por singular privilegio divino, mi Virgen, libre de pecado original, me has dado a luz.

El parte aguas de la Iglesia católica apostólica romana.

Ni el decreto público en el año 1854 y a través del Papa Pío IX, definido como la fiesta de la "Inmaculada Concepción" como dogma esencial para la fe de la Iglesia Universal, en el día 8 de diciembre de 1854.

En oposición a mi persona tu doctrina, como a la de la Iglesia con el siglo XII al frente de Bernardo de Claraval y por San Tomás de Aquino en el siglo XIII.

Tú, mi Inmaculada Concepción, patrona de USA, Brasil, España, Portugal y Córcega.

Tu nombre, la naturaleza emotiva y clarividente.

Tú me expresas la perseverancia, concentración, suficiencia y clemencia. Me amas en lo oculto. Cercana al alma y arrogante. Te gusta sentirse admirada mientras duermes.

Tu naturaleza expresiva es consecuente. Te expresas en la calidad, comodidad y utilidad del atavío personal.

Gustosa te prestarás a mejorar la vida urbana y la familiar. Amas el acompañar y ser acompañado.

Tu talento natural, la mente de pensamiento práctico. Te expresas como pensadora neta y concreta. Aquilatas valores y buscas seguridad en la inversión de tu esfuerzo o de tu capital. Recibes aumento en las actividades de la disciplina, constancia, esfuerzo, lógica y razón. Amas la pericia, la previsión y la concreción.

Podrías destacar en profesiones como contratista, granjera, mecánica, dibujante, empleada pública, empleada administrativa, obrera de fábrica o capataz, contable o política.

Tú, mi número de suerte: el ocho.

La imagen infinita vertical: la fecha de nuestra feliz conquista a tu trágico retorno: el tiempo.