ANÁLISIS A FONDO
Sí aumentó la desigualdad
Francisco Gómez Maza

Afirmarlo no es ser enemigo de FC
¿Que hay más pobres? Por supuesto

iudad de México.- Ah, pero cómo pretende el presidente Calderón tapar el sol con un dedo. Alega que la desigualdad de los mexicanos bajó durante los gobiernos panistas. No se ve. Pasa y pasa el tiempo y lo que sí se ve es que hay más pobres. Al cierre de 2010, 52 millones de mexicanos fueron pobres, el 46.3 por ciento de la población.

Lo que dice la Organización de Cooperación para el Desarrollo Económico es que el ingreso promedio de 10% de los hogares con más recursos fue de 228 mil 900 pesos, en 2008, 26 veces mayor al ingreso de 10% de los hogares con menores entradas económicas, que en promedio recibieron 8 mil 700 pesos al mes, un poquito menos de 3,000 de los del señor Ernesto Cordero.

En los últimos 25 años, los ingresos de los hogares crecieron 1.7% para la población más rica y sólo 0.8% para los menos favorecidos, de acuerdo con las estimaciones de la OCDE, el club de los países más ricos del planeta, en los que está colado México y del cual es secretario ejecutivo el mexicano Ángel Gurría Treviño.

Es más, el mismo funcionario mexicano a cargo de la operación de la OCDE dijo que el estudio sobre la desigualdad de esa organización “disipa los supuestos de que los beneficios del crecimiento automáticamente se filtrarán a las personas más desfavorecidas”.

Está claro, señor Calderón: La distribución del ingreso en el país es muy desigual. Los ingresos de la población son insultantes. La brecha entre los más ricos y los más pobres es de 26 tantos. En los países ricos es de casi nueve veces, que ya es una brutal desigualdad. Pero la que hay en México no tiene calificativo. Es indignante.

Y no tiene por qué sentirse ofendido el señor Calderón. Él, como buen panista, está cumpliendo con su trabajo, que es privilegiar más a las clases privilegiadas. Privilegiar por sobre la fuerza de trabajo al capital. Proteger a los detentadores de los medios de producción. No es de extrañarse. Ha cumplido, como cumplió el ex presidente Vicente Fox.

El propio Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) lo reportó en su más reciente entrega, la de diciembre de 2011. En 2010, hubo 52 millones de pobres, el 47.3 por ciento de la población total de México.

Los datos de la pobreza en los municipios de México proporcionados por el Coneval son demoledores. Puede usted consultarlos en la página electrónica del propio Consejo

http://web.coneval.gob.mx/Paginas/principal.aspx.

“Contar con estimaciones de pobreza a nivel municipal contribuye a fortalecer la rendición de cuentas en el país y a mejorar la planeación de la política de desarrollo social”, aclaró el Coneval en un comunicado de prensa fechado el 2 de diciembre de 2011.

No tiene, pues, por qué sentirse ofendido el señor Calderón por los datos que proporcionó la OCDE. Esta organización, en el fondo, está contenta con las políticas aplicadas por los gobiernos panistas: privilegiar la concentración de la riqueza. Ese es el mandato del PAN desde siempre. Nadie puede esperar que los panistas pugnen por un sistema igualitario. Ellos no pueden comprender lo que es la igualdad.

No tiene pues el señor Calderón por qué defenderse de la OCDE. Todos los medios informativos del mundo publicaron las cifras duras de esta entidad supranacional. ¿Será que todos los periodistas somos idiotas y enemigos del señor Calderón y queremos hundirlo? No lo creo. Simplemente, los periodistas reportaron los datos tal cual, como publicaron los del Coneval, que son más impactantes porque desnudan la cruda desigualdad de los mexicanos. Y el Coneval es un órgano del Estado mexicano.

Los panistas que al fin comprendieron que un sistema político, económico y social es urgente en México ya se fueron del PAN o se están yendo, y están engrosando, curiosamente, no las filas del PRI de Enrique Peña Nieto, sino las del que hace seis años era el peligro para México, Andrés Manuel López Obrador, el porfiado izquierdista que cree que el Departamento de Estado estadounidense lo va a dejar ganar las elecciones del primero de julio del año venidero.

Además, para corroborar que la desigualdad se ha incrementado no se requieren de cifras ni de la OCDE, ni del INEGI, ni de Coneval. El incremento de los pobres se palpa, se siente, en las calles de las grandes ciudades y en lo que queda del campo mexicano.

México tiene, de acuerdo con la OCDE, solo por debajo de Chile, el nivel más elevado de desigualdad de ingresos de los países de esa Organización.

analisisafondo@cablevision.net.mx