Suscribete
965 5 Enero 2012

MUROS Y PUENTES
Después de Iowa
Raúl Caballero García

D
allas, Texas.-
Los resultados de las primeras internas republicanas en Iowa muestran sorpresas que no lo son tanto y “novedades” que son noticias viejas.

La sorpresa de que Rick Santorum —que no ganó por un pelo (se quedó a ocho votos de Mitt Romney)— obtuvo un segundo lugar (con sabor a primero) ya se venía anunciando desde la víspera, incluida la presencia de Ron Paul entre los punteros y, en ese contexto de virtual empate, éste evidencia lo ya sabido: los republicanos están divididos.

Pero la división se da no por estar ante poderosos rivales disputándose una reñida nominación —aunque en sentido estricto (y de manera irónica) sí puede verse como una disputa reñida— sino en todo caso yo diría porque de tan débiles no hallan a cuál irle.

La primera consecuencia, apenas unas horas después de lo ocurrido en Iowa, es que Michele Bachmann se bajó del tren; y, también como se ha contemplado, los rezagados tienden a imitarla y lo harán más temprano que tarde... acaso luego de confirmarse la tendencia marcada por Iowa, en New Hamshire, la semana que viene.
En fin, los que esperábamos ver un solo puntero después de Iowa, vemos a tres que por ahora es un trío que evita el uno, el inapelable, entre los republicanos.

Quién es quién después de Iowa
Pues bien, de los tres se tiene que hacer uno, veamos las fichas reservadas. El ex senador por Pensilvania Rick Santorum (53 años), es un católico hijo y nieto de inmigrantes irlandeses e italianos, y casado (desde hace 21 años) con Karen Garver, con quien tiene siete hijos.

De entre los temas que los republicanos barajan para otorgar su apoyo, Santorum se pronuncia contra el aborto y los matrimonios entre homosexuales; defiende el “diseño inteligente”, es decir la idea de que en las escuelas públicas se enseñe, junto con la teoría de la evolución, la noción de que el Universo tiene un diseño y, en consecuencia, un autor.

Asimismo es un férreo adversario de los impuestos y las regulaciones gubernamentales sobre las industrias; quiere eliminar los programas de asistencia social y privatizar el Seguro Social. Santorum es también uno de los conservadores que respaldaron la invasión de Irak.

En lo que respecta al interés latino, Santorum se opone en el Senado a toda propuesta de reformar la ley de inmigración. Desde su perspectiva los mexicanos (e hispanos en general) indocumentados no deberían recibir ayuda de programas del gobierno y deben ser deportados. Encima propone la construcción de más bardas en la frontera con México.

Por su parte el ex gobernador de Massachusetts, Mitt Romney —de quien se estima posee una fortuna (conjunta con su esposa Ann) de 200 millones de dólares— se viene proyectando como político experimentado y empresario exitoso.

Así llegó como gran favorito a Iowa. Pero no termina de convencer al ala más conservadora del Partido Republicano, despierta recelos entre los ultras de la derecha que desde la campaña anterior lo ven con escepticismo. Sobre todo debe convencerlos de que su religión mormona y sus políticas progresistas en Massachusetts no lo hacen menos republicano.

Romney tiene otra debilidad, ésta pesa (según los analistas) entre los votantes independientes: su imagen de “veleta”, así lo vienen calificando sus contrincantes en estas primarias (y también los demócratas) debido a que ha cambiado de opinión y de postura repetidamente, deberá sacudirse pues esa reputación.

Tiene 5 hijos, nació en Detroit, Michigan, “en el seno de una familia bien acomodada” dice un despacho de Notimex.

Respecto al interés latino sus posturas son como las de Santorum... pero al cuadrado.

El congresista Ron Paul, ese otro “ganador” en Iowa, al que muchos consideran el “padre espiritual” del movimiento de ultra derecha Tea Party, es ante todo un convencido liberal extremista y un antibelicista.
Tiene 76 años, es médico de formación, es “un purista constitucional”, es (como los demás precandidatos) partidario de reducir al mínimo el tamaño del gobierno y de abolir los impuestos sobre la renta y de la libertad de mercado.

Nació en Pittsburgh, Pensilvania, a finales de los 60 se mudó a Texas, donde se ha realizado como especialista en ginecología; es abierto opositor al aborto. Paul ha venido ganando fuerza en las últimas semanas.

Vive en Texas, aquí ha desarrollado su carrera política que comenzó en 1976 al ocupar un escaño en la Cámara de Representantes. Vuelve luego a la medicina y en 1996 fue elegido de nuevo congresista por Texas en la Cámara de Representantes, donde sigue.

Como un “campeón de la Constitución” lo define la página web de su campaña, nunca vota a favor de un proyecto de ley en la Cámara Baja a menos que esté “expresamente autorizado” por la Carta Magna, de ahí lo de “purista”, acaso por lo mismo pudiéramos pensarlo más flexible en las políticas antiinmigrantes... pero estaríamos equivocándonos, al respecto es tan feroz como cualquiera de sus secuaces republicanos.

Raúl Caballero García es director editorial de La Estrella en Casa y La Estrella Digital, en Dallas/Fort Worth, Texas. rcaballero@laestrelladigital.com

Su nombre :
Su correo electrónico :
Sus comentarios :

 

La Quincena Nº92

La Quincena Nº92

15diario.com