ANÁLISIS A FONDO
Acabar con la violencia
Francisco Gómez Maza
El quid está en el cómo
Nadie sabe qué hacer
Ciudad de México.- Los 49 cadáveres, localizados la madrugada del domingo en la nuevoleonesa Cadereyta, ponen de nuevo en la mesa de la reflexión, y de una eventual discusión, la fallida guerra contra los cárteles del narcotráfico, y el llamado crimen organizado, del presidente Felipe Calderón, pero también cuestionan la ausencia de una propuesta alternativa de los aspirantes a sucederlo en la silla presidencial.
De la política de seguridad pública del actual presidente de la república no hay nada que agregar. Está convencido el comandante supremo de las Fuerzas Armadas de su exitazo en eso de “guerrear” con los “narcotraficantes”, no obstante que el país está bañado de sangre, mucha, pero mucha, inocente. Calderón está seguro de que está erradicando a los criminales…
En esa línea va –no puede ser de otro modo– la candidata de Acción Nacional, Josefina Vázquez Mota. Avala la política de Calderón. Tampoco hay mucho que agregar.
Andrés Manuel López Obrador, de las llamadas izquierdas, y Enrique Peña Nieto, del Revolucionario Institucional, se manifiestan por “erradicar la violencia” y curiosamente coinciden con la señora albiceleste.
Los tres coinciden en lo fundamental de la falsa estrategia, pero donde se quedan en el limbo es en el cómo.
Es parecido a los asesinatos de periodistas. La ley de protección, aprobada por el Congreso hace unas cuantas semanas, no detiene los crímenes y lo estamos viendo. Las propuestas para una política de seguridad pública, igual.
Si no, veamos: para Vázquez Mota, la seguridad “será un esfuerzo federal centralizado, porque esa es la ruta más rápida para recuperarla. Y qué más centralizada está actualmente en la persona de Calderón. No sólo no se ha recuperado, sino va viento en popa empeorando.
La propuesta de la panista se basa en tres objetivos iniciales: colocar la paz y la seguridad en el centro de la estrategia. Convertir la confianza entre policías y ciudadanos en el pilar de la seguridad.
Asegurar que las comunidades estén dominadas por los policías y los ciudadanos.
Prevé Josefina un crecimiento “acelerado” en el número de elementos de la Policía Federal (¡dios nos libre!) para llegar a 150 mil. Considera pertinente el apoyo de militares y marinos (otro ¡dios nos…!), mientras se prepara la fuerza policial. Uf…
Peña Nieto propone: establecer academias regionales de policía, que unifiquen el criterio con el cual se forman las fuerzas policiacas. Atacar las causas del delito. Cerrar la fábrica de delincuentes. Buscar que los jóvenes tengan oportunidades de empleo, de entretenimiento, de educación y de formación, inhibidoras de la posibilidad de que los jóvenes busquen en la vida delincuencial una alternativa de vida. Uf.
Crear un sistema de inteligencia efectivo, compartido a nivel nacional, para que los gobiernos municipales, estatales y federal puedan compartir información de las bandas de delincuentes, de los policías coludidos con ellas, y de quienes apoyan, por la vía del blanqueo de dinero, a las estructuras del crimen organizado.
López Obrador, por su parte, propone combatir la pobreza, generar oportunidades de desarrollo para los jóvenes, y combatir la corrupción en los Ministerios Públicos y corporaciones policiacas. Ambicioso, el tabasqueño. ¿Tendrá idea de lo que pretende? El candidato del “cambio verdadero” dice que buscará persuadir a Estados Unidos para tener una relación basada en la cooperación económica, pues no es con medidas coercitivas como se van a resolver los problemas de la violencia y la migración. Sabe Andrés Manuel que en la Casa Blanca y menos en Wall Street no lo quieren ver ni en pintura…
No deja de ser un hombre de buenas intenciones, aunque también de buenas intenciones está empedrado el camino del infierno. Puede que tenga razón Edgardo Buscaglia. Él sabe más que este ecribidor de asuntos de la seguridad pública. Buscaglia asegura que López Obrador es el que tiene una propuesta concreta y bien definida de cómo combatir al crimen organizado. No la veo. (Cuando acabe con la pobreza, cuántos ejecutados habrá habido.) Igual que en el “cómo” erradicar la violencia, cómo combatir la pobreza… Cuántas ilusiones.
Quizá lo original de López Obrador sea que promete someter a consulta ciudadana, o debate, el tema de la legalización de algunas drogas, cosa diabólica para Calderón y Vázquez Mota. Peña Nieto no se define. Sólo dice que está de acuerdo en que se discuta el tema.
“Erradicar la violencia.” Pero. Siempre los “peros” de Análisis a Fondo. (Por algo más que los peros, esta columna no es para ojos castos y buenas conciencias.).
El quid está en el quo modo…
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