ANÁLISIS A FONDO
Cifras mañosas de Hacienda
Francisco Gómez Maza
Para Meade, todo es miel sobre hojuelas
Se oculta la verdad con medias verdades
Ciudad de México.- Optimismo ¿inconsciente?, ¿mañoso?, ¿manipulador? manifiesta la Secretaría de Hacienda respecto de la situación económica de México, en su informe correspondiente al tercer trimestre del presente año de 2011.
El documento, divulgado el fin de semana, peca por destacar medias verdades.
Dice que la economía mexicana continúo creciendo, según lo indican los resultados de los principales indicadores macroeconómicos (de quién: ¿de Hacienda?, ¿del Banco de México?, ¿del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática?). Pero no habla de los evidentes retrocesos.
Ah, y espera que la tasa de crecimiento anual de la economía se haya incrementado con respecto a la observada en el segundo trimestre del año, al disiparse los efectos asociados a la movilidad del periodo de Semana Santa y a los del terremoto de Tohoku en Japón.
No menciona el comunicado de Hacienda que la producción industrial presentó un retroceso mensual de -1.08%. Eliminando el efecto estacional, las industrias manufactureras se redujeron - 0.46% y la minería -0.08%, en tanto que la electricidad, agua y suministro de gas por ductos al consumidor final avanzó 0.44% y la construcción 0.10% durante agosto de este año respecto del mes inmediato anterior.
Según Hacienda, el comportamiento de la economía, registrado por sus econometristas, compensó el efecto de un deterioro en del entorno externo asociado a los problemas de sostenibilidad de la deuda pública en algunos países industriales, los cuales llevaron a mayor volatilidad de los mercados financieros internacionales y a un debilitamiento de la confianza de los hogares y las empresas.
No informa Hacienda que, en agosto, las ventas totales de productos mexicanos a los mercados extranjeros cayeron -3.22%, mensualmente, como resultado de una reducción de -5.08% en las exportaciones no petroleras y de un incremento de 7.47% en las petroleras. Las manufactureras sufrieron una caída mensual de -6.20%, debido a una caída de -15.89% en las exportaciones automotrices y de -1.99% en el resto de exportaciones manufactureras.
Las compras de México en el exterior –las importaciones totales– mostraron, en agosto, una reducción de -4.34%, como resultado de bajas de -11.66% en las compras petroleras y de -3.32% en las no petroleras.
Los datos negativos de la economía son del INEGI (Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática). Y si los tiene registrados Hacienda, no pone énfasis en ellos. ¿Las dos entidades no se coordinan?
Hacienda informa también del comportamiento del empleo y del crédito bancario, dos elementos importantísimos para medir el buen o mal comportamiento de la economía en su conjunto. Dice que el crecimiento del empleo y la expansión del crédito, así como los resultados oportunos de consumo e inversión, apuntan a un dinamismo favorable de la demanda interna.
Pero desestima que el desempleo, de acuerdo con el INEGI, creció 5.79% durante agosto, resultado que inclusive sorprendió a los analistas, quienes esperaban un nivel por debajo del 5.6%.
La tasa de desocupación, de acuerdo con el INEGI, fue superior al 5.44% registrado durante el mismo mes del año pasado, que en términos desestacionalizados, fue mayor al del mes pasado con un nivel de 5.44% frente al 5.27% registrado en julio.
La cifra de trabajadores afiliados al seguro social, en el tercer trimestre del año viene siendo la misma que han manejado las autoridades desde hace meses. De acuerdo con Hacienda, al 30 de septiembre de 2011, el número de trabajadores afiliados al IMSS (Instituto Mexicano del Seguro Social) ascendió a 15 millones 215 mil 211 personas, “nivel que implica una expansión anual de 612 mil 447 plazas (4.2 por ciento)”.
Y por falta de espacio, ya no nos referimos al crédito bancario, ni al mercado interno, ni a las cifras del gasto público, ni a los ingresos del erario, ni a la deuda pública, ante la cual la deuda de Coahuila viene siendo cosa de niños. Tan sólo el saldo de la deuda interna del Gobierno Federal se ubicó en 2 billones 998 mil 115.6 millones de pesos, monto superior en 189 mil 195.4 millones de pesos al observado al cierre de 2010.
Y ya ni hablar del saldo de la deuda externa del Gobierno Federal, el cual se ubicó en 59 mil 422.2 millones de dólares, monto superior en 7 mil 83.2 millones de dólares al registrado al cierre de 2010.
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