EL CRISTALAZO
Dos campaña, dos perfiles
Rafael Cardona
Ciudad de México.- El pasado 19 los diarios publicaron una fotografía singular para estos tiempos de la cólera: Miguel Ángel Mancera, candidato del movimiento global de la izquierda en el Distrito Federal, besaba la mejilla de Beatriz Paredes, aspirante también al gobierno de la ciudad de México.
Ayer, a pocos kilómetros de distancia, ambos dieron inicio a sus campañas. La similitud de la oferta política para los habitantes de la ciudad es quizá la misma de toda la vida: agua, trabajo, seguridad, vivienda, respeto al ambiente, política social amplia y extensa. En un caso, la izquierda presenta todo como el logro de una ciudad al parecer inventada por ellos.
Por el otro, para el Partido Revolucionario Institucional la ciudad ya existía desde el siglo XIV y todo cuanto ahora se haya hecho puede ser mejorado, ampliado, consolidado.
Los inicios de campaña fueron tan distintos en la forma como idénticos en el fondo. En ambos casos (el PRD y los demás en el Monumento a la Revolución; el PRI en el Auditorio Nacional) los personajes centrales no fueron los aspirantes al gobierno. Sus fiestas fueron, a fin de cuentas, la celebración de sus candidatos.
Miguel Ángel Mancera respaldó su presencia ciudadana como candidato de la izquierda con el espaldarazo del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, así la inepta maestra de ceremonias (la descuadrada cantante Regina Orozco) lo haya licenciado como si fuera agente del Ministerio Público, pero el discurso era un interminable elogio al candidato “mayor”, Andrés Manuel, quien en un video pidió vehemente el voto para el ex procurador.
Y como invitó, obviamente a los presidentes de las fuerzas coaligadas (Luis Walton, del Movimiento Ciudadano; Alberto Anaya, del PT y Jesús Zambrano, del PRD) los asoleados asistentes se soplaron (nos) tres horribles discursos llenos de lagoteo al líder moral y al presidente legítimo, mientras en el presídium (donde nadie preside, pues nadie está sentado) Malú Micher se tomaba fotos con Rosalinda Bueso, a quien otro inepto le osifica el apellido y le llama la señora Hueso.
En el caso de Beatriz Paredes la presencia de Enrique Peña, optimista, pletórico, en su “charming best” (o sea, su encanto mayor), la ceremonia permite anticipar la estrategia del PRI: Beatriz y Enrique harán muchos actos de campaña juntos. EL “efecto” Peña (si en verdad existe) debe ser aprovechado de toda manera.
Y ojalá lo aprovechan quitando de los mítines la manía (compartida por el PRD) de hacer espantosos “audiovisuales” propios de una convención de vendedores de autos usados en Oklahoma).
Ayer a Beatriz la sorprendieron con un rollo mal hecho mediante un “loop”, donde repetían y repetían imágenes ajenas al texto, en algo parecido a un documental de promoción de la ciudad de Marcelo: puentes, pisos elevados, Turibús, convivencia urbana, niños con pelota y todo lo demás.
Pero en fin, en la ceremonia al aire libre Miguel Ángel Mancera, quien insiste en repetir lo progresista del movimiento, como si alguien tuviera duda de su capacidad para representarlo, se tira una caminata de sol y aplausos por casi un kilómetro en la avenida bordeada de banderas llamada alguna vez calle del Ejido; mientras Beatriz llega fresca y rozagante al auditorio, con un bello vestido blanco y la cabellera radiante.
Pero el héroe, por decisión de la candidata Paredes, era el candidato Peña, quien en su discurso elogia a Beatriz y la empuja a trabajar con él, a ganarse el voto, a recorrer barrios y colonias. Y el primer acto juntos ya está pensado para este viernes próximo, mientras Mancera logra el más indispensable de sus éxitos: iniciar la campaña con todos ahí para respaldarlo. ¿Cuánto cuestan los apoyos de todas las corrientes?
Ayer mucho. En el futuro, quién lo podría calcular.
Tabasco
Cada día aumentan las oportunidades para Arturo Núñez en Tabasco. Día con día se suman personajes notables a su proyecto. Uno de los más notables, recientemente, fue Jaime Mier y Terán Suárez, ex secretario de Salud (y ex aspirante al gobierno “par lui méme”) quien fue y le ofreció el respaldo de la izquierda tabasqueña.
Ya antes se han sumado Omar Domínguez, regidor por Jalapa; Carlos Arturo de la Cruz, Luis Antonio Ballina y Rocío Castillo, representantes de la Fundación Isabel de la Parra, en Paraíso, Emiliano Zapata y Centro, respectivamente.
Pero además se han incorporado empresarios y dirigentes sociales. ¿Quiénes? Estos: Juan José Jiménez Chan, de la Unión de Sociedades Cooperativas de Balancán y ex dirigente del Movimiento Territorial; Víctor Carballo, titular de la Asociación de Académicos y Ambientalistas; y Miguel Rueda de León, titular de la Fundación Juchimán de Plata, Miguel Montero Acosta, ex subsecretario de Educación Superior y ex presidente de la Asociación de Padres de Familia del estado; Juan Antonio Pérez Alcudia, ex líder del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Estado (SUTSET); Ignacio Ramírez, Carlos López Puga y José del Carmen Toledo Alejandro, también de Fundación “Isabel de la Parra”; Maximino Zapata Hernández, presidente de los ganaderos de Nacajuca; Ciprián Marín Cabrera, operador político priísta en Emiliano Zapata; Ignacio Hernández Rodríguez, presidente de la Liga de Futbol Amateur; Misael Fabián Lara, líder sindical de la Secretaría de Salud federal; y Roger Arias Pérez, dirigente del SITET.
