Los grandes desafíos magisteriales para el 2014
Roel Guajardo Cantú
Monterrey.- Los maestros de Nuevo León, como los de México, contra lo que se diga, cerramos el 2013 con dedicación, trabajo responsable y de resultados. Pero también con incertidumbre, preocupación y zozobra por los retos que habremos de enfrentar en el 2014 en el ámbito laboral y social.
Mientras que los hombres del dinero y el grupo gobernante se frotan las manos por los escandalosos negocios que habrán de realizar con la privatización de los recursos energéticos y las reformas que han empujado en su favor, los maestros debemos de prepararnos para abordar los grandes desafíos que nos depara el nuevo año que está por arribar.
Después de las reuniones de trabajo, posadas navideñas, convivios familiares y recapitulaciones de lo que hicimos, de las realizaciones que alcanzamos, y de lo que dejamos pendiente, en el mes de enero vamos a enfrentarnos a:
Primero: La cuesta de nuevo año, con una inflación galopante, aumentos o actualizaciones (de precios) como le llaman los economistas y hasta los dirigentes sindicales para justificar su negocio de las altas tasas de interés, por los préstamos que con el dinero de nuestras propias cuotas hacen a los maestros sin estar regulados por la Comisión Nacional Bancaria.
Segundo: La grave falta de atención médica especializada y la escasez de medicamentos en el ISSSTE y en los Servicios Médicos de la Sección 50, que los representantes sindicales de ambas secciones ni se preocupan por ello. La salud de los trabajadores de la educación y sus problemas es lo que menos les importa.
Tercero: La cancelación de nuestro derecho a los cambios y ascensos por la negativa de la Secretaría de Educación y la complicidad de la dirigencia del SNTE para realizar las reuniones de Cambios y Ascensos para Preescolar, Educación Especial, Primarias y Secundarias en el mes de Febrero en perjuicio de alumnos y maestros, así como en la organización de las propias escuelas para el logro académico.
Cuarto: El continuo y silencioso cierre de escuelas de todos los niveles educativos, desde Educación Especial hasta Preescolar, Primarias y Secundarias Vespertinas, pasando por las Secundarias Nocturnas con el propósito de compactar la planta laboral y fortalecer la bolsa de ahorro o economías en la Secretaría de Educación, aumentando así la expulsión de alumnos del sistema educativo (Febrero – Junio 2014).
Quinto: Un reto importante para el 2014 es la negociación de los convenios anuales de las Secciones 21 y 50 del SNTE con el Gobierno del Estado a efecto de sostener e incrementar las prestaciones y el salario de los maestros y los trabajadores de la educación. Continuar con la inercia de Febrero del 2013 a la fecha, implica permanecer de rodillas ante la autoridad como lo está la dirigencia del CEN del SNTE y de las Secciones 21 y 50 en Nuevo León (Mayo 2014).
Sexto: La armonización de las Leyes Secundarias de la “Reforma Educativa” como la Ley General de Educación (LGE), la Ley del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE) y la Ley del Servicio Profesional Docente (LSPD) con la legislación del Estado de Nuevo León, a fin de aplicar la evaluación obligatoria y punitiva a los docentes y directivos para correrlos con el pretexto de insuficiencia, adelgazar la planta laboral de la SEP y privatizar la educación pública (Marzo 2014).
Los efectos de la supuesta “Reforma Educativa” en realidad los vamos a empezar a sentir a partir del 2014 y las verdades a medias o mentiras de la Secretaría de Educación y de la dirigencia del SNTE quedaran al descubierto, como han quedado desenmascaradas las falsedades en las que se apoyaron para asegurarnos en el pasado reciente que con la Reforma a la Ley del ISSSTE se iba a modernizar y a eficientizar el servicio médico y ampliar las prestaciones sociales a los trabajadores y en la actualidad, padecemos la atención más deficiente a la salud y las prestaciones económicas y sociales son más restringidas y de uso discrecional por los líderes y sus allegados como sucede con las becas comisiones de la SEP.
El 2014 representa un verdadero reto para los trabajadores de la educación como consecuencia de la “Reforma Educativa”, en donde nos cancelan la oportunidad de cambios y ascensos; se cierran escuelas a diestra y siniestra, se centraliza la nómina para el pago a los maestros federales, se acaba la doble negociación (nacional y local) con el inevitable riesgo de perder conquistas laborales en el renglón de aguinaldo y diferentes bonos y prestaciones. Se armonizan las leyes secundarias con las del estado para operar los cambios y lesionar los derechos adquiridos de los maestros.
Mientras todo esto sucede la atención e interés de los dirigentes de las Secciones 21 y 50 del SNTE, profesor Casimiro Alemán Castillo y profesor Guadalupe Castillo García, se han concentrado en promover los juegos deportivos nacionales del SNTE, el encendido de pinos navideños, la organización de posadas y rifas con motivo de fin de año, la promoción de préstamos y pólizas de seguros de gastos médicos mayores, en el acaparamiento de plazas por jubilación y contratos para asignarlos a sus compromisos y familiares y en resucitar al partido de la vergüenza, la traición y la alianza (Panal).
De ellos no podemos esperar una defensa a nuestros derechos e intereses, porque se han convertido en los mejores operadores y servidores de la SEP, traicionando a los maestros.
El tema es qué vamos a hacer nosotros para enfrentar unidos y con éxito estos desafíos que van contra nuestra fuente de trabajo, nuestros derechos laborales y nuestra dignidad. Nos espera un año de lucha y sacrificio, en donde todo parece imposible hasta que se hace. (Nelson Mandela.)
