Demandas de las mujeres 
Lupita Rodríguez Martínez

Monterrey.- El pasado 6 de marzo, la Sectorial de Mujeres del Partido del Trabajo y las Ligas Femeniles del Frente Popular “Tierra y Libertad” participaron en una jornada más de lucha por el Día Internacional de la Mujer.

Acto masivo que concentró a más de dos mil mujeres en la Macroplaza, tribuna del pueblo para demandar respeto a los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres.

La principal demanda es que la autoridad garantice el respeto a dichos derechos en la etapa de la maternidad. Pedimos también definir leyes y políticas que reconozcan que el embarazo y el parto no son una enfermedad, sino un hecho fisiológico, íntimo y trascendente, en el cual la madre, el padre y el recién nacido son los protagonistas. Pedimos además que se haga valer nuestro derecho de tomar decisiones informadas y libres sobre cómo, dónde y con quién parir, bajo el cuidado de profesionales e instituciones de salud que consideren y resuelvan nuestras necesidades individuales y den prioridad al bienestar integral de nosotras como madres y de nuestros bebés.

En el acto masivo los principales pronunciamientos fueron hechos por madres, doctoras, profesionistas y estudiantes, destacando el discurso de la Dra. Alina Deborah Bishop Velarde, cofundadora y expresidenta de Parto Libre A.C., quien es promotora de diferentes iniciativas de ley a favor del parto humanizado. La Dra. Bishop planteó que es necesario brindar una atención integral en el embarazo y el parto, así como un trato digno a la madre y al bebé. De acuerdo con la evidencia científica, varias de las prácticas de atención al parto realizadas por rutina en los hospitales no son eficaces, no dan los resultados deseados y, en algunos casos, llegan a ser contraproducentes. Por ello, señaló que entre las recomendaciones de la OMS sobre prácticas de cuidado en el parto que promueven el máximo beneficio para la madre y el bebé, están: el derecho al acompañamiento durante el parto, la libertad de movimiento, la posición durante el parto, el contacto inmediato piel con piel entre madre y bebé, el uso restrictivo de la episiotomía en partos vaginales sin riesgos y la oposición al pinzamiento y corte inmediato del cordón umbilical.

En la jornada de lucha también se escuchó la demanda a favor de ampliar la incapacidad por maternidad de las madres trabajadoras a un mínimo de seis meses, período recomendado por la OMS para la lactancia materna exclusiva. Las promotoras del parto humanizado exigen, a la vez, el derecho de las madres a elegir el parto en casa cuando así lo deseen y las condiciones lo permitan, así como contar con el apoyo de una partera, pero, sobre todo, de contar con el registro de identidad de forma inmediata de su hijo.

La salud reproductiva y la maternidad son derechos que no deben conculcarse y toda madre debe elegir informada y libremente el lugar y la forma con quien tener su parto, en un ambiente de seguridad, cuidado y respeto. Es justo dar esta lucha por tantas mujeres que han sufrido la violencia de género. Por ello, la Sectorial de Mujeres y la Ligas Femeniles nos unimos a esta justa lucha haciendo propias las siguientes demandas:

ü Educación perinatal obligatoria en todos los hospitales de maternidad.
ü La ampliación a seis meses del tiempo de incapacidad por maternidad.
ü Instalaciones pro-lactancia en los centros de trabajo.
ü Adecuar las instalaciones hospitalarias para permitir el parto vertical.
ü Crear un organismo especializado para la atención y sanción de quejas por violencia obstétricas.
ü Eliminar la prescripción automática en recién nacidos de sueros y leches artificiales innecesarios.
ü Permiso de paternidad por un mes tras el nacimiento de un nuevo hijo.
ü Establecer bancos de leche en hospitales de maternidad públicos y privados.
ü En caso de que el bebé presente alguna enfermedad de atención grave, la incapacidad de la madre dure hasta que el médico lo indique.
ü Solicitar el consentimiento informado de los procedimientos rutinarios en los partos hospitalizados.
ü Permitir el acompañamiento durante el parto por persona que la madre desee.
ü No separar a la madre del bebé tras el parto.
ü Asegurar una atención obstétrica de calidad y calidez.
ü Registrar y autorizar a parteras para expedir los certificados de nacimiento de acuerdo al marco legal.

“Por un mundo donde seamos: socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres…” Rosa Luxemburgo.