ESR
Joaquín Hurtado
Monterrey.- Tengo el orgullo de anunciar al honorable Consejo un nuevo producto, joya de la corona de nuestro consorcio. El gobernador electo saluda con entusiasmo a nuestra Empresa Socialmente Responsable (ESR).
Como inversionistas sensibles apostamos por la causa verde, la derrama de empleos y la sana convivencia familiar. Nosotros no vendemos cosas, construimos futuro.
Brindemos por el magnífico joint venture Cerradas Ecológicas Los Salitres. Ya ven cómo las bellas palabras fertilizan los solares más infames. Se ubicará en el polígono exclusivo la Chorreadera, sector Chupaderos, ex hacienda la Calavera. Sanearemos los mefíticos campos convertidos en fosas clandestinas donde descansan en paz miles de malos mexicanos.
Este desarrollo habitacional revitalizará las inhóspitas cañadas que bajan impetuosas del cerro, vibrará con las alucinantes pedreras y sus espectaculares explosiones. Un socavón de cascajo dotará a diez mil familias con la magia perpetua de sus evanescentes remolinos de polvo. Ranchos avícolas obsequiarán frescas nubes de moscas que crearán un micro clima en pleno desierto.
Ofreceremos alta plusvalía prometiendo lo que no empobrece. No adelantemos vísperas que es de mal agüero. Algún día habrá complejos comerciales de alto ingreso, centros culturales y de esparcimiento, hoteles boutique, gimnasios, iglesias, corporativos, colegios con lo más granado de la sociedad, campos de golf para obreros. Eso vende.
El abastecimiento de agua está plenamente garantizado. Ya se abrió una negociación para reciclar las aguas residuales de las granjas porcinas del sector. El subsuelo está enriquecido con metales pesados, cortesía de la industria en ruinas. Estos minerales son fundamentales para el perfecto desarrollo del cuerpo. No sólo de calcio se construyen los huesos de los niños, también requieren plomo, cadmio, mercurio, cobalto, arsénico.
Mi hermano diputado, accionista destacado, facilitará los permisos faltantes. Comeremos con el delegado del Instituto de Vivienda, desayunaremos con el de Ecología, los funcionarios son padrinos de mis hijos. Les ofertaremos una codiciable bolsa de votos para su partido en las elecciones intermedias.
El tema vial se resolverá apenas el Ayuntamiento apruebe en fast track los planos y estudios de impacto, rechazados veinte veces. Aunque hay un edil de un grupo bastante independiente, debe saber cómo manejarse en los atajos burocráticos con absoluta discreción. Un donativo no le caerá mal a su fundación de equinos con capacidades diferentes. El transporte deficitario hoy abundará mañana. Conectaremos a esa gente que monta en bestias con el progreso del pesero.
Dios mediante, ya concluida la obra, procederemos con la compactación de las áreas más inestables localizadas en los antiguos tiraderos de desechos químicos. Ahí levantaremos canchas, clínicas, escuelas y huertos. Un cuartel con 500 militares de Cocula desalentará el delito infantil.
El financiamiento ya está amarrado, no tardan los subsidios federales, tan jugosos que hay que exprimirlos entre varias manos. Por eso nos apalancamos en las valiosos lecciones de nuestro querido ex-mandatario, experto en intermediación constructiva, él dispuso millones en prebendas para las armadoras extranjeras. Su expertise vale oro, literalmente hablando.
Los privilegiados residentes disfrutarán de la romántica y sensual experiencia de la Boca de Lobo, un efecto óptico en cuarta dimensión del miedo cinematográfico. Las noches en Los Salitres serán tan oscuras que la gente optará por el recogimiento espiritual o la astronomía mientras llega la electricidad. Brindemos.
