FRONTERA CRÓNICA

Manifestaciones populares

J. R. M. Ávila

No cabe duda que de cada región surgen manifestaciones de cultura popular a partir de los problemas que le aquejan hondamente. Algunas de esas manifestaciones, aunque dan a conocer entre líneas situaciones muy serias y hasta trágicas, mueven a risa en primera instancia, como esta supuesta oración que parodia versos muy antiguos y que circula por el noreste de México:

Santa Pascuala, que no me alcance una bala

San Andrés, que no me toque un secuestro exprés

San Abulón, líbrame de un levantón

San Macario, que no me confundan con un sicario

Santa Enriqueta, que no me quiten mi camioneta

Santa Librada, que no me caiga una granada

San Timoteo, que no me quede en medio del tiroteo.

Otras producciones populares no pretenden mover a risa sino a la reflexión, como es el caso del corrido ‘Estado de Vergüenza’, interpretado por “Los Cenzontles” de San Pablo, California. Su autor es Eugene Rodríguez y denuncia a la ley SB 1070 de Arizona por criminalizar a los inmigrantes indocumentados en Estados Unidos de América. Estos son algunos de sus versos:

Este corrido canto yo con mucha pena / de la desgracia que ocurrió en la nación / de esta ley que han pasado en Arizona / que legaliza la discriminación / por falta del valor moral y fortaleza / la migración se niegue a reformar. / Ahora sufrirá la gente que trabaja / y las familias separadas seguirán.

Versos sueltos, corridos. Por supuesto que estas manifestaciones de cultura popular surgen ante hechos que han cimbrado a la sociedad desde abajo hasta arriba. Me quedo pensando en la desaparición de Diego Fernández de Cevallos y su posible relación con lo popular y solo vienen a mi memoria los espectaculares y las inserciones en los periódicos, que duran mientras hay quien pague. ¿Por qué no se ha escrito hasta ahora un corrido sobre su desaparición? ¿Será que al pueblo no le ha afectado este suceso? Por otra parte, ¿qué tipo de corrido le correspondería? ¿Uno político, uno narco, uno cristero? ¿Se hablaría de él alabándolo, denigrándolo, denunciándolo, lamentando su desaparición?

No sólo no se le ha compuesto un corrido, sino que hasta televisa se negó a difundir noticias acerca del asunto. ¿Alguien entiende esto? ¿Alguien comprende por qué una niña de primaria tiene el valor de cuestionar a Michelle Obama sobre la situación de los inmigrantes en Estados Unidos, aún cuando la madre de esa niña es indocumentada; mientras que televisa le da la espalda a uno de sus mayores baluartes políticos de los últimos veinte años? ¿Será acaso que Diego Fernández de Cevallos ha pasado a engrosar las filas de los Menos, de Felipe Calderón? Si alguien tiene respuesta a estas preguntas que nos las haga llegar.

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