El expediente de Elba Esther
Hugo L. del Río
Monterrey.- Y el SNTE y el Panal callaron. ¿Miedo? Gordillo está en la cárcel porque desafió al gobierno de Peña Nieto. Lo merece: debió haber caído en prisión hace por lo menos veinte años, pero fue aliada y quizá cómplice de cuatro Presidentes de México.
Entre 2002 y 2003, Héctor González (homónimo de mi muy querido amigo y colega regiomontano), editor de Bajo Palabra, la mejor revista policiaca que conozco; un servidor y otros reporteros, llevamos al general Rafael Macedo de la Concha, entonces procurador de la República, documentos que probaban los trastupijes de la chiapaneca: eran facturas, algunas por cientos de miles de dólares, expedidas por tiendas cuya clientela no es precisamente la prole envidiosa.
La más modesta era Nieman Marcus. Héctor tiene unos contactos increíbles en Estados Unidos, entre los que se incluyen funcionarios del FBI, la DEA, la CIA y muchas otras agencias. “Vamos a investigar”, prometió este abogado militar. Se tomaron su tiempo.
Elba Esther nació para la traición, usar y abusar del poder, el amor por el lujo y una ambición sin límites por el dinero. En comparación, Eugenio Grandet era un pobre amateur. Además, era un avaro, en tanto que a Gordillo la perdió su obsesión por vivir y vestir mejor que la reina de Inglaterra.
La de Chiapas no quiso ser secretaria de Educación: para qué, si gobernaba todo el sistema educativo de México, al tiempo que era dueña del sindicato y el Panal. Coincido con Félix Cortés Camarillo: el espectacular arresto nada tiene que ver ni con la justicia ni con la educación de adolescentes y niños ni con cosa alguna que no sea el guante o guantelete que la de Comitán le lanzó a la cara de EPN, y bueno, hay que aceptarlo: la jugada fue maestra, una carambola de varias bandas, porque al tiempo se anunció que son más de 26 mil los desaparecidos en el sexenio calderonista.
El michoacano queda bastante lastimado. Esto quizá va más contra Calderón que contra Gordillo. Todo México pregunta: ¿por qué tuvo que entrar un nuevo gobierno para poner a Gordillo en el lugar que legítimamente le corresponde? Elba Esther tiene un expediente más largo que el chapo. No sólo es el billete de los maestros que pasó a ser suyo: también hay sangre y muertos. Pero no nos hagamos ilusiones: igual sale: fácilmente llegará a un acuerdo con el gobierno.
Y eso de que sigue Romero Deschamps, bueno, no es imposible, pero me parece poco probable. Los petroleros no reaccionaron al arresto de la Quina: sabían que fue reprimido por apoyar a Cuauhtémoc Cárdenas. La situación es distinta y Romero Deschamps es un hampón despiadado.
El SNTE no puede paralizar a México, aunque suspenda las clases, cosa que, en mi opinión, difícilmente hará. Los petroleros sí pueden hacerlo. El SNTE y el Panal callan. Si EPN leyera, podría repetir las palabras de Heine: “Como veis, Madame, no debéis temer por mí. Puedo contemplar muy tranquilamente el mundo”.
