ESTADO DE LOS ESTADOS
Negocios a la vista
Lilia Arellano

El dinero es una nueva forma de esclavitud, que sólo se distingue de la antigua por el hecho de que es impersonal , de que no existe una relación humana entre amo y esclavo.
León Tolstoi

Ferrocarriles y telecomunicaciones van
Codiciados sistemas para el transporte
Siguen las cortinas de humo petroleras

Cancún.- No cabe ni la menor duda de que estamos en procesos de grandes cambios; eso, todos lo hemos notado, sentido, lo estamos viviendo y no precisamente en el mejor de los sentidos.

Bien pudiéramos empezar por lo que se refiere a los grandes negocios, a ese rubro que hoy por hoy ocupa el primer lugar en la jerarquización de los asuntos que debe atender la autoridad, el gobierno, los mandatarios, los funcionarios y hasta los segundones. En la charola de referencia aparecen nada menos que las telecomunicaciones, los ferrocarriles, los aeropuertos, el petróleo, el gas, la generación y distribución de la energía eléctrica, el manejo de los puertos, las minas y, un elemento vital: el agua. Y esos son los renglones que interesan, los que provocan que las cuentas bancarias se abulten, los que llevan a quienes las impulsan a ocupar distintas posiciones dentro de los directorios de los corporativos mundiales.

De ahí que en el presente surjan sin ningún rubor los rostros de todos y cada uno de los que protegen este tipo de intereses en donde lo que menos importa es cuál es el presente del país y sus ciudadanos y que puede esperarse del futuro, tanto del inmediato como el de largo plazo que será garantía de impunidad para quienes desde ahora formulan estrategias. Con la captura de supuestos lavadores de dinero en Pemex, tanto de ingresos que presumen pueden venir de la venta y distribución de estupefacientes como del robo del combustible efectuado en los defectuosos ductos que componen la vieja red de la paraestatal, se pretende ocultar lo más importante, los contratos múltiples, la participación de la iniciativa privada extranjera con cláusulas que eliminan al mismo gobierno de cualquier injerencia, participación, supervisión y hasta reglamentación.

Se ha generado un gran escándalo en torno a Oceanografía,  empresa petrolera a la que se le multó con 24 millones de pesos, se le inhabilitó para trabajar con el gobierno federal durante dos años, ¿y? La compañía seleccionada resulta que es la que se vio favorecida con todo el andamiaje de relaciones elaborado por doña Martita Sahagún de Fox, por lo que estaba garantizada su salida a la luz pública con la generación de reacciones que distraigan la atención sobre un asunto de sobra conocido, tanto en la forma como en el fondo. No ha sido para nadie un secreto que los narcos en algún lugar deben proveerse de combustible para sus transportes y que tales sitios no pueden ser los oficiales, los que lucen letreros de PEMEX, las gasolineras “formales”. En el pasado reciente quedaron abiertos expedientes que daban cuenta de los robos que se cometían e incluso se identificaron las bandas y las relaciones de éstas con gente dentro de la paraestatal y en los altos niveles federales. ¿Qué pasó? Casi nada, lo usual, corrieron a Alejandro Gertz Manero. Les estorbaba.

Hoy difundir esa información será utilizado como cortina de humo para poder avanzar en otros renglones en tanto la opinión pública se muestra distraída y contenta de que un señor de nombre Martín Díaz Álvarez, accionista de Oceanografía, sea llamado a cuentas por operaciones que llegaron a sumar en un par de años 11 mil millones de pesos y que en este mismo asunto se relacione a los intocables Bribiesca. No está mal que se haga este tipo de investigaciones, aprehensiones, que se castigue a quienes cometen este y otros delitos, lo que es altamente reprochable es la farsa que de nuevo montan para que el socio de los hijastros del guanajuatense se vea libre de todo cargo en breve y si acaso pague una multa, dinero que después le será devuelto con un jugoso contrato de participación en el mismo renglón: en el petrolero.

Y sí, definitivamente estamos cambiando. En ese mismo rubro tenemos que reconocer que vendrán inversiones interesantísimas y altamente rentables para quienes las promueven y las respaldan, pero habrá que estar ciertos de que tales derramas no llegarán a donde deberían, a los dueños tanto de la tierra como de lo que de ella se explota. Ahí tenemos ya la pelea a la vista. La de quienes quieren participar o acrecentar su participación y dentro de ellas están las grandes fortunas del mundo y por supuesto la del mexicano que nadie quiere: Carlos Slim.

En el tren de la ausencia
Lo que está para algunos prohibido, para otros es la manga más ancha y la marcha atrás. Así sucede con la reforma en el renglón ferroviario. Como es sabido tal fue promovida por Ernesto Zedillo Ponce de León y de golpe y porrazo desapareció la red. La operación se realizó sin que se supiera bien a bien cuál era el patrimonio de los Ferrocarriles Nacionales de México. Una opacidad absoluta ha rodeado este tema y el monto en el que fueron subastadas las estaciones, las vías, todo el esquema que terminó, en el caso de la central ubicada en la capital de la República, albergando una tienda departamental cuando se dijo que se conservaría como la Gran Central de Nueva York y que sería un punto de gran atracción.

Para la cartera de negocios que se tiene en mente este sistema de transporte es elemental y de ahí que también se gestara un encuentro entre los ex presidentes más cuestionados por la creación y la operación de una crisis económica de la cual no logra recuperarse el país y mucho menos sus habitantes, la del 94. Las empresas beneficiadas por Zedillo, Kansas City Southern la única que tiene vía libre de Lázaro Cárdenas a los Estados Unidos y que fue rematada por mil 400 millones de dólares y que controla toda la comunicación por esta vía del centro-noreste del país, así como la canadiense Ferromex, son las principales opositoras a que se revise esa reforma en la que, curiosamente, el PAN acepta que se lleve a una consulta popular para determinar si debe cambiar, transformarse, modificarse sin que esto, por supuesto, suponga que habrá beneficios para quienes eran sus tradicionales usuarios o en general para el desarrollo nacional.

Habría que ver cuál es el directorio de la AMF, de la Asociación Mexicana de Ferrocarriles, A.C., porque en sendos desplegados señala que sus asociados están preocupados por esa iniciativa de reforma a la Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario aprobada apenas el 4 de febrero pasado. Argumentan que se pone en riesgo el exitoso proceso que inició en 1997 que incluyó la participación privada bajo el esquema de concesiones para la prestación del servicio ferroviario de carga. ¿Exitosa? ¿En dónde están los nuevos tendidos de vía? ¿En dónde los trenes modernos, nuevos? ¿En dónde se han generado empleos? ¿Tienen ocultas las estaciones ferroviarias? ¿Ha escuchado usted el silbido tradicional de este transporte? ¿No? ¿Desde cuándo?

Alegan también que pone en riesgo el Estado de Derecho, ese que puso de relieve Zedillo en Davos. Que también está en riesgo la seguridad jurídica de las inversiones afectando la credibilidad nacional. Que no incentiva el crecimiento de la red ferroviaria; que atenta contra la rectoría de este sistema; que afecta la operatividad, eficiencia y seguridad. Todo eso provoca el otorgamiento de una concesión que hizo desaparecer, que borró del mapa todo un sistema que con defectos mil tenía un objetivo y lo cumplía y en este se podría incluir el renglón social ya que siendo económico y contando con varias categorías permitía que distintas clases sociales pudieran ir y venir a sus lugares de origen, independientemente de que era el medio idóneo para conocer muchos de los rincones del país ricos en infinidad de renglones culturales. Con el tren muchos llegamos a amar nuestra tierra, a conocer de sus dichos, sus cánticos, sus sabores, sus olores. La vista se recreó una y mil veces en el verde de los campos, en la identificación de las siembras.

Para la transportación de los negocios en puerta este sistema es otra vez imprescindible. Y ahí está centrada la atención.

Comunicación a las carteras
Está la fibra óptica, las concesiones, las telecomunicaciones, la participación del holding de Carlos Slim y Salinas de Gortari así como de otros que en su tiempo formaron un equipo cómplice en el terreno de las telecomunicaciones. Son estos los momentos del amarre en todos estos rubros que significan los grandes negocios, las mejores operaciones, la garantía de la permanencia y del poderío tanto económico como el que, a través de él, puede tenerse en lo político. Y ahí están los aeropuertos con apellidos conocidos e identificaciones televisivas visibles. El de Palenque es otra muestra de lo que verdaderamente interesa en el presente y no puede desligarse al apellido Chico Pardo de todas las pretensiones en este renglón.

Está en el ánimo popular la creencia de que lo que hoy importa dentro del gobierno federal es la realización de esas inversiones que se significan como los grandes negocios que serán, como lo han sido, para el beneficio de unos cuantos.

Sucede en este país
Con gran orgullo se publicita la portada de la revista Time, que luce el rostro de Enrique Peña Nieto. Saldrá a la venta justo el día de mi cumpleaños, el 24 de febrero. ¡Vaya regalito! Ahí se dice que le reconocen que hubiese logrado todas las reformas que se propuso; y, ¿cómo no van a sorprenderse si en otros países lograr enmiendas los lleva a discusiones de buen nivel en sus respectivos parlamentos o cámaras? Y, aquí, basta con lanzar unos buenos cañonazos de esos que desde antaño se acostumbran para que todo quede aprobado, para que lo que menos cuente sea la tranquilidad y el beneficio del pueblo. Seguramente que saben que las que se han hecho en otros mandatos bajo el mismo partido, es decir, el PRI, fueron generadoras de una gran miseria; y, ¿será sobre esta que se edificarán los nuevos emporios?

¿Qué no hay enfrentamientos? Resulta que Teléfonos de México le ganó un contrato pequeño a Televisa, a Axtel, Alestra y Operbes por la cantidad de 255 millones de pesos. El contratante es la SEP. Y cómo no sería así si hay paisanaje y éste se respeta; ¿o apellidarse Slim y Chuayffet no tiene importancia? Aunque esto va más allá y muestra equipos y grupos.

De los pasillos
Quienes conocen muy de cerca a Miguel Ángel Osorio Chong, interpretan la mirada y las expresiones del titular de Gobernación en el momento de sus declaraciones. Dicen que cuando dijo que ya “Castillo aclaró” –en relación a la famosa reunión que sostuvo con un capo del que dice que no sabía que era capo con todo y que se hizo auto famoso con la  afirmación de que sus 10 años de experiencia como policía le permitían reconocer de inmediato a los malosos–, lo que se guardó fue una semejante palabrota de esas que acostumbramos soltar cuando queremos que simplemente dejen de “estar chingando”. Para el hidalguense lo dicho es verdad y nada puede haber que lo desmienta, no ante los ojos de quienes, azorados, han venido contemplado esta y muchas otras escenas que en nada contribuyen a esa tan cacareada paz michoacana que lo que está resultando es toda una amenaza.

En este país de cínicos, en el que pronosticó José López Portillo que habríamos de convertirnos, ya parece que poco es lo que nos puede sorprender. En Davos, Ernesto Zedillo habló de que en México se necesitaban solamente 3 cosas: Estado de Derecho, Estado de Derecho, Estado de Derecho. Y lo dijo quien tuvo bajo su tutela la aplicación de ese Estado de Derecho, de esa “cosa” que no supo, no pudo, no quiso, ni acercar ni poner en práctica ni ordenar, ni siquiera ver pasar. Felipe Calderón, le ha deseado a Enrique Peña Nieto éxito en el renglón seguridad, en ese en el que para él fue total y rotundo fracaso, en ese que logró que el país se sembrara de cadáveres, en ese que ha logrado que el temor cunda entre todos los ciudadanos.  Carlos Salinas habla de lo que pensó que se lograría pero que, a vista de los que soportamos las aplicaciones de sus decisiones, nos resultó todo lo contrario y sin que se le despeine un pelo –que no tiene, pero hay que hacerle igual, ni lo vemos, ni nos damos cuenta–, lanza las pedradas sobre el “culpable de la crisis que generó 12 millones de mexicanos en extrema pobreza”; ¿y los suyos, cuántos fueron? Tampoco se despeinó para hablar de la aplicación de las leyes y se le olvidó la sospechosa cremación de su hermano Enrique, la siembra del cadáver a La Quina y los muertitos de la izquierda.

Dicen que quieren enjuiciar a Zedillo por la venta de los ferrocarriles. Si esto llegara a suceder, ofrezco ingresar a la Congregación de las hermanas de la Madre Teresa de Calcuta… Se tejen historias y una de ellas habla de un personaje muy conocido en Cancún, quien primero vendió todas sus empresas, luego se enfermó, unos días más tarde se murió y llegó al lugar en donde dicen que ha hecho mucho bien en una pequeña cajita, en una urna, sin que siendo tan creyente se le celebrara, ni en el piso en donde fundó su emporio ni en donde dicen que vio la luz por última vez,  una misa de cuerpo presente. Si tiene usted algún nombre en mente, por favor, hágamelo saber y yo le diré si le atinó, aunque lo importante sería saber si se trata de un ardid para cambiar de nombre y personalidad y eludir cualquier acción que tenga que ver con la justicia, sobre todo con la de EU, o si de verdad, descansa en paz…

Uno menos que la justicia mexicana busca; se trata del ex tesorero de Humberto Moreira quien se entregó solito en El Paso, Texas a las autoridades. Se supone y se espera que lo embarquen a México y principalmente a Coahuila de inmediato… Parecería que es el momento de pelear por la regulación del “todo incluido” ya que se presentará una iniciativa de ley secundaria en materia de competencia económica y eso lo ha hecho el propio Peña Nieto. Es el tiempo para que los de la CANIRAC se pongan las pilas… Madero ha pasado a ser de líder a delincuente electoral. Por lo menos así lo está clasificando el buen Cordero, el de Calderón, el que no quita pecados sino que agrega ceros a la derecha de la cuentas de su ex patrón… Lo bueno es que ya dieron el primer paso para la legalizar la marihuana en el Distrito Federal y para muchos un buen “churro” hará la diferencia…

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