MALDITOS HIPSTERS
No se agüite, Porrúa, que para todos hay
Luis Valdez

Monterrey.- La editorial Porrúa dio un paso para atrás en la pasada UANLeer 2014, llevada a cabo en el Centro Cultural Colegio Civil, la semana pasada: se retiraron en plena feria. ¡Qué vergüenza!

Los hermanos Porrúa se enojaron y uno de ellos, descarriado, fundó Miguel Ángel Porrúa, que aunque no tiene los mejores títulos del mercado profesional, al menos no vive de portadas con diseños anquilosados ni de títulos aprovechados por ser libres de derechos. Otras editoriales lo hacen sin vergüenza, sin pena ni gloria, como la superchafa Editores Mexicanos Unidos (deberíamos levantar firmas para que le cambien el nombre a esa editorial), y en el caso de Porrúa, la colección “Sepan Cuántos” (que lo único que me gustaba eran sus prólogos).

¿Por qué mi odio hacia Porrúa? ¡No los odio! A pesar de que sus vendedores también sean cargadores, a pesar de que los hermanos Suárez tengan el poder en Monterrey (porque como típicos defeños se vinieron en desbandada a ocupar los espacios). También a pesar de que el anterior  encargado de la sucursal de San Agustín era un ignorante que todavía recibe el premio interno de irse a manejar la de Plaza Cumbres. Es decir, que hasta ahora no he visto una administración seria entre los cabecillas, que igual puede ser una mujer que grita histéricamente a sus empleados delante de los clientes (aunque entre los presentes haya niños) de Las Plazas Outlet y… otro premio, ahora es la encargada general, con oficina en Padre Mier.

Así hasta da miedo acercarse a cualquier sucursal de Porrúa, sí. Por tal motivo deberían aprovechar las ferias del libro en que pueden salir y convencer a la gente de que sus títulos valen la pena.

Pero es una lástima que teniendo estas oportunidades, se vayan a mitad de una feria de libro. A final de cuentas hay para todos. Editores Mexicanos Unidos no se echó para atrás, y al menos eso es de enorgullecerse.