INTERÉS PÚBLICO
Independientes
Víctor Reynoso

Puebla.- Este martes 20 de septiembre, el ingeniero Pedro Ferriz de Con se presentó ante alumnos de la Universidad de las Américas Puebla. Su presencia logró llenar el auditorio, de medianas dimensiones, quedando varias personas sin poder entrar.

Muy cuidadoso de no incurrir en temas que pudieran generar la acusación de “actos anticipados de campaña”, sus exposición inicial y su diálogo con los estudiantes fue lo que se espera de alguien que ha sido periodista radiofónico por más de cuarenta años: clara, dinámica, con sentido del humor. Las reacciones en el auditorio fueron diversas.

Habló de las nuevas tecnologías, de cómo exigen nuevos conocimientos, y de cómo todo esto va a transformar el ámbito laboral. Temas relevantes para jóvenes que se están formando profesionalmente. Ameno y bien informado, a veces con una imaginación un tanto arriesgada, consiguió la atención de los jóvenes. Señaló por ejemplo que hoy las mayores empresas de taxis en el mundo, como Uber, no poseen ni un solo taxi. O que la empresa que más factura en hospedaje en el mundo, airbandb, no tiene un solo cuarto de hotel.

Las preguntas fueron cordiales. Igualmente el tono de las respuestas. Los comentarios de los asistentes después del encuentro fueron muy variados. Por un lado, los estudiantes de los primeros semestres estaban entusiasmados con el conferencista. Los convencieron sus ideas, estilo, actitud.

Los estudiantes de los últimos semestres, en contraste, reaccionaron con escepticismo. Consideraron que las respuestas de Ferriz no fueron claras, que se mostró evasivo. Que el lenguaje con el que se refirió a algunos grupos, como a las “Marías” (mujeres indígenas que laboran en las calles de las grandes ciudades) y la comunidad lésbico-gay, tenía un dejo sutilmente despectivo. Hay que aclarar que Ferriz declaró que se deben aceptar y reglamentar los derechos de esta última comunidad. Ahí no dejó duda. En el tono, en las analogías, algunos notaron un asomo de discriminación.

La diversidad de las reacciones es sintomática del país en que vivimos, de nuestra pluralidad. En una misma universidad, jóvenes que difieren solo dos o tres años de edad, tienen reacciones muy distintas ante la misma persona. Vieron y escucharon lo mismo, pero no vieron ni escucharon lo mismo.

Respondió a las preguntas sobre tres cuestiones ya planteadas por Jorge Castañeda: si los interesados en ser candidatos independientes en 2018 debieran unificarse y ponerse de acuerdo en un solo candidato, si debe haber una misma agenda de gobierno y un equipo de campaña que después se convirtiera en equipo de gobierno. Sobre un solo candidato independiente respondió que la propuesta era suya, que la había hecho a distintos precandidatos (Castañeda, el Bronco y Emilio Álvarez Icaza) y que acordó con el primero que apoyarían a quien fuera arriba en las encuestas.

Respondió también que ya había hablado con diversas personalidades para conformar su gabinete de gobierno, pero que había acordado con ellas no dar sus nombres.

No comentó en ese momento sobre una agenda común. Antes había respondido que su programa de gobierno lo haría con la sociedad. Y dio argumentos convincentes: una sola persona, aunque cuente con el apoyo de un equipo, difícilmente puede hacer un programa de gobierno que abarque temas como la agricultura transgénica, la educación, los problemas ambientales.

Tiene razón, en cuestión de temas específicos. Pero también creo que quienes pretendan ser candidatos independientes deben proponer una agenda general. No tan general como “la refundación de la república”. Un programa que señale los problemas públicos que se atenderán de manera prioritaria, y un señalamiento básico de cómo se abordarán.

El acuerdo en una misma agenda básica, en un solo candidato apoyado por los precandidatos con menos posibilidades de ganar la elección, la conformación de un equipo de trabajo congruente y sólido, harán la diferencia entre un proyecto de nación y un proyecto personal. Todos tenemos, o deberíamos tener, proyectos personales. Pero si apuntan hacia un cargo público dejan de ser meramente individuales. Exigen la subordinación del interés de la persona al interés público. Es este uno de los puntos en los que los candidatos, independientes o no, nos deben convencer.

* Profesor de la UDLAP.