Los chilenos sí se unieron
Martha Sáenz

No podemos unirnos para salvar las vidas de cientos de personas inocentes que día a día sin saber cómo ni cuándo van siendo asesinadas dentro de una guerra que no es la suya.

El narcotráfico, los militares, los sicarios y los oportunistas que se han aprovechado del caos en el que vivimos para hacer de las suyas, poco a poco no sólo han destruido vidas, sino también han mermado la Fe y la Esperanza de los mexicanos.

No hay día, y mucho menos noche que un solo mexicano no se pregunte: ¿quién seguirá ahora?, ¿a quién le tocará estar en el lugar y la hora equivocada?, ¿qué podría yo hacer para proteger a mi familia?, ¿cambiará esta situación algún día?, ¿existirá algún gobernante que responda por los suyos?, ¿enfrentarán las autoridades su incompetencia para controlar la violencia?, ¿provocará algo o alguien que nos unamos para defender a los nuestros?

Esas y muchas preguntas más, las cuales no son nada tranquilizadoras, pasan una y otra vez por la mente de los mexicanos. Hemos llorado la muerte de mártires inocentes a los cuales se les ha truncado su futuro, hemos pedido, protestado, gritado, exigido y despotricado, y nadie absolutamente nadie nos escucha. No hay una sola voz que nos tranquilice con hechos de que existe una ligera esperanza de cambio para que retorne la paz.

Por más de dos meses Chile se unió y no sólo pusieron todo su esfuerzo, sino toda su energía, tecnología propia y extranjera para salvar 33 vidas que merecen por derecho estar aquí, disfrutar de la vida y de sus familias. Seremos tan limitados que no podemos seguir el ejemplo para proteger la nuestra y de nuestros seres amados.

Parece que lo de Chile era una tragedia pero tuvo un final feliz, porque aplicaron "La unión hace la fuerza". Ellos son un ejemplo a seguir. Nosotros nos hemos dejado derrotar por la tristeza y desesperanza de que jamás tendremos un final feliz.

www.marthasaenz.com

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