EN LAS NUBES
Sabias respuestas
Carlos Ravelo Galindo

Ciudad de México.- Todo hace suponer, no hay duda, que el supremo gobierno es sordo, ciego, pero no mudo. Lo confirma en cada momento cuando, con inusitada alegría sus autoridades hablan y ofrecen sabias respuestas.

Por ejemplo: “no quedará sin castigo”. Pero quién. No los pendientes  de justicia en estados y municipios de la República (azules, tricolores, amarillos o verdes), cuyos ex mandatarios exculpan sus pecados  con pañales de seda, en el extranjero.

Ni los homicidios de la guardería abc; ni la explosión en Pémex; ni mucho menos la galopante corrupción, ni los sesenta mil asesinatos con Fecal.

Nadie olvida a Jolopo cuando respondió a los periodistas: “No te pago para que me pegues”, luego de escucharlos decir: “Te pego para que me pagues”. Ni a don Peje, ayer, cuando interrumpió su descanso en apoyo a don Arturo en su acusación a quien sustituyó en el Edén: “No se inundó Tabasco, porque el ex se llevó hasta el agua”. La usa para lavar su mucha ropa”, a lo que respondieron con grandes carcajadas. O la de Chente al preguntarle si fuma mota. “Yo solo la sembraré  y venderé  si  legaliza “mi” gobierno”.

El ingenio, a veces, nos llega de fuera. A Jorge Luis Borges en una entrevista en Estados Unidos quisieron confundirlo al preguntarle si en Argentina había aún caníbales. “No, ya nos los comimos a todos”, respondió.  Sir Winston Churchil, en la Cámara, al opacar a una opositora que le gritó: “Si fuera su esposa, le daría veneno”, contestó: “si fuera su esposo, me lo tomaba”.

O aquel anciano político mexicano que al encontrarse con una también muy antigua novia, y  escuchar de ella un “Adios, viejo chocho”, contestara ufano: “Adios chocho viejo…”. Ojalá escucháramos pronto: ¿Te vas? “No, me van.”

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