No hay paz con Fuerza Civil
David Carrizales
Monterrey.- A lo largo de casi dos años de operar en Nuevo León con el propósito de alcanzar la seguridad y la paz, Fuerza Civil, que fue concebida como un “movimiento ciudadano”, más que una simple institución policial, se ha visto envuelta en casos de robos, violaciones sexuales, y acusaciones de colaborar con la delincuencia organizada. El escándalo más reciente es por la utilización de un helicóptero oficial para pasear a dos damitas.
Este martes, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) informó que concluyeron las pesquisas sobre el asunto que ha causado indignación en las redes sociales, al difundirse el fin de semana fotografías de dos jovencitas a bordo del helicóptero XB-MPF de Fuerza Civil, que está reservado para labores de patrullaje, vigilancia y rescate.
Señaló la SSPE que los pilotos que prestan servicios a las aeronaves de la dependencia, no son elementos policiales, ni pertenecen a las Secretaría de Seguridad Pública del Estado.
Asimismo informó que el helicóptero en cuestión –que presta servicio a la Secretaría de Seguridad Pública– es rentado; y la empresa designa a la tripulación para el manejo de las aeronaves.
A raíz del uso del helicóptero para fines personales, “esta secretaría se comunicó con dicha empresa, solicitando el relevo, inmediato e inapelable, de los pilotos”, por lo que “consciente del problema causado a la secretaría, la empresa procedió a aceptar la renuncia de los dos empleados involucrados en el evento. Tales renuncias fueron remitidas en original a esta institución.”
Recalcó la SSPE que utiliza los helicópteros únicamente para fines operativos, por lo que “rechazamos este tipo de conductas por parte de personal externo que presta sus servicios a nuestras corporaciones policiacas.”
Pero este no es el primer asunto bochornoso en que se ve envuelta Fuerza Civil. Apenas el tres de julio pasado, el vocero de Seguridad y coordinador de Comunicación Social del gobierno de Nuevo León, Jorge Domene Zambrano, informó sobre el arraigo a cuatro policías de la mencionada corporación, implicados en el homicidio de un joven y lesiones a un acompañante.
Supuestamente, los oficiales de Fuerza Civil entregaron a un grupo de la delincuencia organizada a dos jóvenes, uno de ellos, Luis Alfredo Alemán Ortega “El Maca”, quien apareció ejecutado a balazos horas después. El Maca era sobrino de Alfredo Ortega Trujillo, coordinador de la Agencia Estatal de Investigaciones.
Otros casos que mancharon a la institución policial ocurrieron el 18 de mayo de 2012, cuando integrantes de la familia Sánchez Gutiérrez, acusaron a oficiales de la patrulla 325 de Fuerza Civil, por el robo de 150 mil pesos, que presuntamente sustrajeron de un domicilio de la colonia Moderna de Monterrey, al realizar una detención de tres personas del sexo masculino, porque presuntamente se dedicaban a la venta de drogas.
En febrero de 2012 se conoció el primer escándalo de corrupción, cuando el oficial Marcos Estrada Marroquín, fue acusado de robar un celular y un aparato electrónico de un domicilio en Monterrey. Presuntamente, Estrada acudió a un fraccionamiento privado al responder a un reporte de robo.
Sin embargo, durante la revisión en el domicilio, al sur de la ciudad, el policía se apoderó de un BlackBerry que vendió posteriormente a otro policía en dos mil pesos. Además fue acusado de hurtar un reproductor de música iPod.
Semanas después, tres elementos de Fuerza Civil fueron acusados de abusar sexualmente de dos mujeres, una de ellas menor de edad. Fueron señalados como presuntos responsables Jorge Arturo Martínez Ramírez y David Moisés García o Garza Saucedo. Otros seis elementos más fueron acusados por omisión al permitir el ataque.
El 21 de abril de 2012, dos efectivos de Fuerza Civil dieron muerte a balazos a un ladrón que presuntamente estaba desarmado, en la colonia Fray Servando Teresa de Mier.
Y el tres de mayo del año anterior, cinco oficiales de Fuerza Civil, fueron acusados de golpear y despojar de 45 mil pesos a un ciudadano.
