EL CRISTALAZO
La trinca infernal
Rafael Cardona
Ciudad de México.- Nos lo dijeron de muchas formas y lo dieron a conocer en libros y reportajes, frente a los cuales la displicencia fue la única respuesta: el trío Juan Camilo Mouriño, Felipe Calderón (primero los difuntos) y César Nava, entre otros e incluidos los directamente responsables en cargos administrativos, hicieron de Petróleos Mexicanos no el objeto de su combatividad antimonopólica contra el Estado (vieja cantaleta de la derecha) sino una caja abierta donde meter los brazos hasta el codo y sisar la más importante empresa pública nacional.
Hoy aparece una información importante, cuyo antecedente podría ser la explosiva expansión de las empresas de la familia Mouriño en Campeche, estado de suma importancia en la actividad petrolera desde construyeron un imperio prolongado hasta Galicia y sus quebrados astilleros a los cuales se rescató a fines del sexenio pasado.
Pero si eso fue el tema del desmesurado crecimiento del grupo Ivancar, entre otros (más de 100 millones de pesos en contratos hasta marzo del 2008) otro es el hallazgo de una contabilidad paralela en la empresa cuya productividad y corrupción sindical se usaba como argumento persuasivo ara la entrega de concesiones y la apertura indiscriminada, tal y como ahora la plantea el Partido Acción Nacional tras los pasos de Calderón.
La información más reciente dice:
“…El gobierno de Felipe Calderón creó en 2010 una tesorería paralela de Petróleos Mexicanos (Pemex) en la que se depositan las ganancias de las 39 empresas filiales de la paraestatal que operan en el extranjero y que, de acuerdo con una muestra elaborada por la Auditoría Superior de la Federación (ASF), durante 2011 obtuvieron ingresos por cerca de 434 mil millones de pesos que no reportaron al erario.”
“En la revisión de la Cuenta Pública 2011, la ASF señaló que los activos de las filiales de Pemex en diversos países suman 92 mil 144 millones de pesos.”
“Las ganancias que obtienen las filiales extranjeras de Pemex no pueden ser auditadas por el Congreso ya que las empresas no están sujetas a la Constitución, ni a la Ley de Petróleos Mexicanos, ni a la legislación que regula a las empresas de participación estatal mayoritaria.”
“La decisión de Calderón de crear “una tesorería falsa”, paralela a la Pemex, permite que los recursos generados por las filiales se manejen al margen del Congreso”.
El recurso de la doble contabilidad es práctica antigua de los evasores fiscales y los “gangsters”. Así se manejaba Alphonse Capone, “Al Capone, famoso de mafioso de Chicago hace ya muchos años. El entramado de aquellos mafiosos se reventó por la cuerda fiscal. Como todos sabemos, Leslie Shmway y Fred Reis ex contadores de Capone abrieron la boca a cambio de convertirse (desde entonces) en testigos protegidos y pagados. El 5 de junio de 1931, Capone fue acusado de 22 cargos de evasión fiscal por 200 mil dólares.
La información sobre las maniobras fiscales de “Al Calderone” proviene (según La Jornada) no de sus antiguos colaboradores sino de la Auditoría Superior de la Federación.
“…desde 2007 la ASF ha venido señalando la existencia de esas empresas extralegales, pero fue en 2011 cuando llevó a cabo una muestra auditable, de la que resultó que los ingresos de las 39 filiales de Pemex fueron de 433 mil 419 millones de pesos.”
“Se trata sólo de lo que pudo investigar la ASF; las utilidades deben ser mucho mayores, pero al operar en el extranjero es difícil auditarlas porque se rigen por leyes de los países donde están asentadas.”
“De todas formas –agregó– si se suman esos ingresos con los activos que también detectó la ASF, resulta que Pemex tiene ahí 525 mil millones de pesos…”
MANCERA
Hoy presenta la izquierda, al menos la agrupada en torno del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas (ya se sabe cómo es esa tendencia, tiene tantos brazos como un pulpo zurdo), su propuesta de Reforma Energética de la cual sabemos lo fundamental: ninguna modificación al texto constitucional y limitaciones expresas a cualquier intervención del sector privado más allá de la proveeduría y el contratismo. Más o menos dejarlo todo igual, pero con nuevo régimen fiscal.
En esas condiciones ya se tiene los tres planteamientos: la derecha entreguista al extremo de resucitar las concesiones, la izquierda aferrada al dogma de la intocabilidad constitucional y la sacralidad del 27 y la presidencial cuya solución equilibra lo desequilibrado.
En este sentido vale la pena la actitud del jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera:
“Haremos un análisis responsable y lo que puedo reiterar es que nosotros vamos a apoyar la propuesta de la izquierda, de eso no tengo ninguna duda… Sí, tengo una postura, mi postura es que vamos a un debate responsable, y segundo, vamos a apoyar la propuesta de la izquierda”.
