EL CRISTALAZO
Versiones y gritos
Rafael Cardona
Ciudad de México.- Si bien desde un comienzo se dijo los acuerdos del Pacto no significan unanimidad ni obligación más allá de la propia agenda en lo temático o en lo formal, la actitud del Partido de la Revolución Democrática con su negativa a continuar en los foros de análisis sobre la Reforma Energética contradice el espíritu mismo de la convivencia política y hasta el ejemplo del fundador del Partido.
Inequidad, han dicho los legisladores perredistas por el número de los defensores de una y otra posturas.
Sin embargo no dudaron en acudir cuando en su nombre (al menos en el de su tradición nacionalista) hablaba un “peso completo”; el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas.
Por eso es interesante analizar las palabras de Miguel Barbosa, el coordinador del PRD en el Senado, en el momento del retorno a las viejas tradiciones; el sabotaje por ausencia o la toma de tribuna. Ya por no hablar de la política callejera de marcha y plantón.
−¿Ya hay algún viraje en la decisión de ayer, de regresar a los foros en materia energética, o sigue la misma postura?
−No, no vamos a regresar, fue definitiva nuestra decisión. Y andamos en una secuencia para organizar los nuestros pero va a ser un anuncio más formal.
−¿Entonces el PRD organizaría sus propios foros?
−Podría organizar sus foros, lo vamos a decidir mañana.
−¿La determinación parte de qué, Senador?
−Pues, estamos nosotros, tenemos una serie de ponentes que podrían constituir un escenario muy interesante para organizar los foros de la izquierda mexicana.
−¿Aquí en el Senado o en San Lázaro? ¿Dónde serían?
−Acá en el Senado, con toda la infraestructura del Senado de la República.
−El coordinador del PRI, Emilio Gamboa, ¿ya lo buscó para tratar de distender el clima, y tener diálogo para que regresen ustedes a los foros?
−No, a ver, para el Grupo Parlamentario del PRD la decisión de separarnos de los foros, no constituye una crisis en el Senado o sea, nosotros somos profesionales del trabajo parlamentario y no asumimos que este tipo de circunstancias sean constitutivas de una crisis. Es definitiva nuestra decisión y por eso estamos construyendo, y lo anunciaremos mañana, la posibilidad de poder hacer nuestros foros, con personajes, con ponentes muy reconocidos, en este marco, en el marco del Senado. Y vamos a invitar a mucha gente.
−Pero justamente senador ¿no es esto como una suerte de berrinche?
−No, nosotros no íbamos a seguir participando en foros que tenían una participación de ocho a uno, respecto a quién iba defender la propuesta gubernamental.
En ese sentido también valen las palabras de Emilio Gamboa, coordinador del PRI:
“Van a continuar los foros, creo que no son inequitativos. Hablaré con el senador Barbosa, le diré ¿a quiénes quieren traer? Estamos en la mejor disposición. No es un mandato del PRI, fue un acuerdo de la Junta de Coordinación Política. Ustedes lo vivieron ayer, fueron foros equitativos; el jueves vendrán otros personajes.”
“Lo que nosotros queremos es oír todas las voces. Ustedes escucharon de voz propia que yo era de la idea que viniera Andrés Manuel López Obrador, y que aquí plasmara sus ideas, sus inquietudes, pero tomó la decisión de no venir.”
“Estamos, de verdad, abiertos a que nos diga el PRD quiénes quieren que vengan a los foros y vendrán, sin duda alguna. Y los senadores del PRI, del Verde y del PAN, estaremos atentos a lo que nos digan los personajes que invite el PRD.”
−¿Es estrategia del PRD para llegar a una consulta popular al final y descartar los foros como opción?
−Lo que pasó ayer debe haber sido que los diputados del PRD fueron los primeros que descalificaron los foros. Nosotros estamos abiertos, lo reitero. Hoy platicaré de nuevo con el senador Barbosa (ayer lo hice) para decirle “pasa la lista a la Junta de Coordinación Política”.
“No tiene nada qué ver el presidente de la Comisión de Energía, quiero puntualizarlo, ni con el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, fue un acuerdo que es del conocimiento de todos ustedes, lo pueden pedir, leer lo que dice, hay una equidad absoluta hacia todos los partidos.”
“No sólo eso, tiene dos preguntas cada partido. El PT, por darles un ejemplo, tiene cinco senadores y tiene 20 diputados, tiene dos preguntas; el PRI, que somos 231 diputados y 54 senadores, tenemos dos preguntas, más equitativo no se puede”.
El problema, digo yo, consiste en la institucionalidad con la cual se quieran manejar las discusiones. No serán estos los primeros foros organizados para ese mismo fin en el Senado de la República. En el parlamento se habla, se discute y hasta se grita. En la calle nada más se grita.
Hay quienes quieren someter todo este proceso a la consulta popular. Estaría bien si se firmara un compromiso de aceptar el resultado de la consulta y saber de antemano cómo se va a preguntar a los consultados. Si la pregunta única es: ¿quiere usted regalar el petróleo de la Nación a los extranjeros? ya sabemos la respuesta. El maniqueísmo nacionalista no resultaría una forma seria de preguntar nada.
Sería en todo caso el sí y el no, una forma politizada de jugar a los volados.
La consulta requeriría información, no expresiones de fe.
