Suscribete
 
1417 1 Octubre 2013

 

Faltó el aliento de mujeres sabias
Lídice Ramos Ruiz

Monterrey.- En el trascurso del año en curso y en especial en la semana que acaba de terminar, hemos disfrutado del aniversario numero ochenta de la creación de la UANL. Felicitamos a las personas organizadoras de ello y nos felicitamos por ser parte de los festejos.

Sin embargo, consideramos que faltó ponderar el aliento de mujeres sabias de la localidad que favorecieron con su creatividad la construcción de la misma.

En 1933, la UANL recogió los esfuerzos previos que en materia educativa tenían, entre ellas la Escuela de Artes y Labores Femeniles “Pablo Livas” que funcionaba en el estado desde 1921; la Escuela  Industrial  “Álvaro Obregón” creada en 1932, junto el Colegio Civil que data de 1857 y que comprendía la instrucción de bachilleres y carreras de Jurisprudencia y Medicina, dejando fuera los estudios normalistas, situación que hemos lamentado en épocas subsecuentes y anexando entonces Química y Farmacia.

En el ordenamiento universitario de 1933, las escuelas de artes y oficios femeninos y masculinos pasaron a llamarse Escuelas Industriales y en 1974 dejan de impartir educación separada y se transforman en instituciones mixtas, de mujeres y hombres para posteriormente transformarse en Preparatorias Técnicas en 1977.

Hoy, nos interesa destacar el aliento de maestras que desde 1921 hasta 1977 dirigieron el espacio “Pablo Livas”, semillero de personas cuyas manos y cerebros han ayudado a forjar el imaginario de Monterrey como ciudad industrial y laboriosa. Francisca Ramírez Anguiano, Carmen Mancilla, Petra Villareal, Belem Garza Chavarría,  estuvieron al frente de la institución en 1933; Raquel Cantú Leal, Julia Garza Almaguer, Guadalupe Villareal Muñoz acompañadas un año por el respetable maestro Celso Flores Zamora.

En los tiempos que corren, en que la inteligencia y los conocimientos humanos han florecido exponencialmente, bien vale la pena  reflexionar y valorar cómo entre los senderos diversos que la universidad ha caminado para alentar la flama de la verdad, hay calor y pasión de mujeres que durante sus ochenta años se han nutrido del aliento de estas primeras damas.

Faltó sin lugar a dudas este reconocimiento.

 

Su nombre :
Su correo electrónico :
Sus comentarios :

 

 

15diario.com