Echan abajo el replaqueo
David Carrizales
Monterrey.- El Congreso local, por 23 votos a favor (PAN-PRD-PT) y 19 en contra (PRI-Panal), aprobó ayer martes una reforma a la Ley que crea el Instituto de Control Vehicular Del Estado De Nuevo León, para quitar al Ejecutivo estatal (en este caso, al gobernador Rodrigo Medina de la Cruz) la atribución de dictar una medida administrativa para obligar al uso de placas nuevas en todo el padrón vehicular.
La fracción panista retó al gobernador Medina de la Cruz a ejercer su derecho de veto, “contra el sentir generalizado de la población”; pero le advirtió que será una medida inútil, porque podría llevar a cabo el replaqueo pero sin poder cobrarlo, porque no le aprobarán el impuesto en la Ley de Ingresos para el 2014.
La iniciativa panista reformó por adición el artículo 24 bis de la Ley del ICV, para quedar como sigue: “Los medios de identificación vehicular se expedirán por única ocasión para inscripción, reposición, cambio de propietario y los demás casos que especifica esta ley”.
Asimismo señala que las láminas también se podrán reponer en caso de deterioro de las mismas, con previo pago de derechos; pero “en ningún caso se podrán renovar los medios de identificación vehicular de todo el padrón por disposición administrativa”.
En un debate que requirió tres rondas de oradores, los priístas alegaron que la mayoría panista pretende sacar raja política, y quiere quitar el cobro de placas porque le conviene electoralmente para el 2015.
El diputado tricolor Juan Manuel Cavazos, comentó que el canje de láminas obedece a la aplicación de una norma oficial de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, que se puso en vigor en 2002, y la primera vez que se hizo en Nuevo León fue durante el gobierno de Fernando Elizondo Barragán.
Agregó que el impuesto es solamente para los que tienen un vehículo, y el pago por tres años (320 pesos) equivale a menos de un tanque de gasolina. Pidió a la población no dejarse engañar por las acciones electoreras del PAN.
En respuesta, el diputado blanquiazul, Luis Angel Benavides Garza, mencionó que en el gobierno de Elizondo se hizo un replaqueo, pero entonces no hubo un robo de 313 mil láminas (que representó un quebranto de 60 millones de pesos), como en la actual administración. Llamó a los priístas “títeres del gobernador”, porque es quien les dice cómo votar, pero “serán traidores del pueblo si no aprueban esta reforma a la ley”, les espetó.
El priista, Francisco Cienfuegos, expuso que el tema de las placas tiene que ver con la política de seguridad, pues las nuevas láminas tendrán un chip que permitirá conocer los datos del vehículo de manera inmediata, y este cambio dará también la oportunidad para llevar un “censo puntual”, de todas las unidades en circulación.
Enrique Barrios y Luis David Ortiz, ambos del PAN, señalaron que el gobierno pretende hacer creer que los recursos se utilizarán para beneficio de la población, pero lo cierto es que el ICV, es autónomo y no tiene por qué ni puede compartirlos, porque además ya tiene sus ingresos comprometidos.
