DISPARATES
Ni fu ni fa
Armando Hugo Ortiz

Monterrey.- Buena parte de los mexicanos esperábamos, con algo de morbo, el mensaje de Peña Nieto durante los funerales de Fidel Castro en la Habana, para divertirnos con alguna ocurrencia improvisada, o error de dicción.

Nada de eso, texto sobrio pero anodino, con lugares comunes de “amistad incondicional con el pueblo cubano”, de Fidel, “figura emblemática de la segunda mitad del siglo XX”. Solo faltó la trillada frase de: “les acompaño en sus sentimientos y mi más sentido pésame”. Lo bueno y lo malo es que su discurso desaparecerá en el mar de la mediocridad.

El funeral congregó a mandatarios de izquierda, en especial latinoamericanos, que han mantenido todo tipo intercambios con Cuba. Ausentes Brasil, Argentina, Chile, que dieron giro a la derecha. Peña Nieto estuvo entre puros “populistas”, como el presidente de Cuba, Raúl Castro Ruz.

Fue de los últimos oradores, turno 15 de 18, cuando la Plaza de la Revolución se había vaciado en tres cuartos (Roberto Zamarripa, reforma.com). Habló seis minutos y ni fu ni fa; lo felicitaron al final por mero protocolo.

Peña Nieto es ajonjolí de todos los moles. Está a la expectativa de reuniones de presidentes –velorios incluidos– para llegar en su avionsote, sin esperar invitación se acopla solo, todo le vale, lo que llamaban un huelebailes.

Terminadas las exequias de Fidel, cada gobierno enfrentará a su modo, el reto de Donald Trump. Cuba como lo ha hecho desde medio siglo, con dignidad, valentía y apoyo popular; Peña Nieto y sus compinches en caída libre, con bravatas de que estamos preparado para todo.

Mas todo mundo lo sabe, al fin de cuentas el gobierno de México se plegará a las órdenes del Tío Sam.

Por lo pronto está como los burros mañosos, encogiendo el cuerpo en espera de los golpes del arriero.

a_hugo16@hotmail.com