m
613
30 de agosto de 2010
15l
Google
 


 

SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO
Viejos y nuevos recursos didácticos
Edilberto Cervantes Galván

Hace dos años el Gobierno Federal puso en marcha lo que denominó Reforma Integral a la Educación Básica. La reforma ha consistido hasta ahora en la elaboración y distribución de nuevos libros de texto gratuitos.

Al inicio del pasado ciclo escolar (2009-2010) fueron los alumnos de primero y sexto año de primaria quienes recibieron los nuevos textos. Ahora, en el ciclo 2010-2011, son los alumnos de segundo y quinto grado quienes van a estrenar libros de texto.

La calidad de los libros de texto gratuitos siempre ha sido materia de debate y es la Secretaría de Educación Pública la responsable editorial y de contenidos. La crítica se ha dirigido históricamente hacia la definición de los contenidos, la forma en que se trata cada tema, así como su valía didáctica.

La tentación para los gobiernos en curso de introducir contenidos que les interesan  siempre ha estado presente. Con un sentido programático y político se piensa que los alumnos de primaria deben estar enterados, a través de los libros de texto, de lo que al gobierno le interesa y de lo que no, pues no. Así, los libros de texto aparecen cargados de contenidos, sin ton ni son o con lagunas notables.         

En esta oportunidad la crítica a los nuevos libros es bastante fuerte. El especialista Olac Fuentes Molinar ha señalado que en los libros para segundo y quinto grados se presentan fallas similares a las que se encontraron en los libros para primero y sexto, distribuidos hace un año. “Persiste –dice Olac Fuentes- la saturación de contenidos, la simplificación de los procesos históricos, omisiones y falta de coherencia interna”. La falta de cuidado editorial se reflejó también en errores ortográficos.

Lo que resulta más grave es que –siguiendo a Olac Fuentes- los contenidos “se ataron” al proceso de evaluación ENLACE. “No contribuyen en nada a una concepción seria de la calidad educativa”.

Si, bien o mal, eso pasa con los libros de texto, que han sido el recurso didáctico tradicional, ahora, después de años de atraso respecto al contexto internacional, el Gobierno Federal se decidió a introducir en forma masiva computadoras en las escuelas y dotarlas con acceso a Internet. Una  tecnología que se está utilizando como recurso didáctico en muchas partes del mundo desde hace años.

En ausencia de un programa estructurado de informática educativa a nivel nacional, han sido los gobiernos estatales y las instituciones de educación privadas las que “por su cuenta y riesgo” se han atrevido a invertir en tecnología informática adaptándola a los procesos educativos.

En este desconcierto de política educativa, el Gobierno del Distrito Federal se decidió por un esquema denominado “Aula Digital”, que consiste en dotar de una aula equipada con computadoras (un promedio de 25 computadoras) con acceso a Internet a cada plantel. A la fecha están equipadas mil 711 escuelas y en este ciclo se equiparán otras 240. Al final del ciclo escolar se verán beneficiados alrededor de 1 millón 170 mil alumnos de primaria y secundaria del Distrito Federal.

Por su lado, el Gobierno Federal anunció el compromiso de dotar a alumnos y maestros de 40 mil escuelas secundarias de computadoras con acceso a Internet de banda ancha. Se trata de equipos lap-top (portátiles) diseñados en el MIT (Harvard, Mass.) por el programa de Nicholas Negroponte: el reto global de este programa es proveer a cada niño de una computadora con un costo menor a 100 dólares. (En la India se están diseñando equipos electrónicos para los estudiantes con costos sustancialmente menores.)
 
Para evitar críticas, así lo señaló un subsecretario de la SEP, se dejará a cada gobierno estatal la responsabilidad de elegir a las empresas que equiparán a los alumnos. Salvo que en este campo no hay equipos genéricos que puedan competir con la misma configuración en una posible licitación: al definirse una configuración de hecho se está seleccionando un equipo y un proveedor.

En lo relacionado con los equipos para los maestros no se mencionó qué mecanismo se va a seguir. (Desde hace años el SNTE había logrado el compromiso del Gobierno Federal de apoyar a los maestros con equipos informáticos.)

Un dato curioso es que esta iniciativa no es un programa de la SEP, sino de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Lo cual podría explicar algunas de las limitaciones.

Así como la utilización de los libros de texto requiere de la guía y orientación de los maestros, también con la informática se requieren maestros capacitados, estrategias didácticas y desarrollo de programas específicos.

La falta de recursos didácticos adecuados y suficientes no se resuelve con la mera impresión de libros o con la compra de computadoras. El problema no es sólo de equipamiento. Allí está el costoso fracaso, en tiempo y dinero, de la Enciclomedia.

 

Para compartir, enviar o imprimir este texto, pulse alguno de los siguientes iconos:

¿Desea dar su opinión?

Su nombre :
Su correo electrónico :
Sus comentarios :

 

 

dts

et

 

s

 

 

80pind

 

 

Para suscripción gratuita: