Suscribete
997 20 Febrero 2012

¿Intercampaña política?
Juan Reyes del Campillo 

Ciudad de México.- Vaya lío en que se metió el Instituto Federal Electoral con eso de la intercampaña. Como el cohetero, quedó mal por todos lados, sobre todo con los medios, quienes siguen despotricando contra la reforma electoral de 2007. Azuzados por la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión, muchos comunicadores han puesto el grito en el cielo; aducen que las reglas no están claras, y que durante mes y medio verán restringida su actividad al no poder los futuros candidatos promover su figura ni sus propuestas.

El IFE ha tenido que tomar un acuerdo para precisar lo que debe suceder en este tiempo. En buena medida porque los medios iniciaron una campaña para exigir claridad respecto a lo que no está en la ley y consideran que se está violentando la libertad de expresión. La misma CIRT ha amenazado con acudir a organismos internacionales, lo cual seguramente no tendrá ningún efecto, ya que cuando esta instancia tome una decisión, la elección ya se habrá llevado a cabo.

Pero qué va a pasar en este periodo en el que no podrán darse a conocer propuestas ni pedir el voto a los ciudadanos. Qué pueden hacer los candidatos para no incurrir en actos anticipados de campaña. Es evidente que no pueden realizar actos de proselitismo en los que se convoque a la población a participar o a escucharlos, mucho menos impulsar su figura ni intentar convencer a la población para inclinarse a su favor en las elecciones de julio. Tampoco pueden difundir propaganda y es obvio que no tendrán acceso a los tiempos oficiales en radio y televisión.

Se supone que en este lapso, los partidos y los candidatos deberían ponerse a ordenar sus estructuras organizativas en aras de un mejor desempeño durante las campañas; a definir o precisar las que serán sus propuestas y a revisar las estrategias que van a utilizar de mercadotecnia política. Por lo general, los candidatos desarrollan sus campañas políticas alrededor de un núcleo de propuestas, en el sentido de impulsar algunas ideas fuerza que los distingan de los demás candidatos. Como ahora las campañas se reducen a tres meses, a diferencia de otros tiempos en los que se recorría prácticamente todo el país, tendrán entonces que definir y desarrollar un número menor de actos políticos.

Pero qué es lo que le preocupa a los medios, por qué dicen que se limitará la libertad de expresión y para qué hacen tanta alharaca sobre lo que llaman  lagunas de la ley electoral. Lo cierto es que el Cofipe no precisa lo que sucede en este tiempo que han llamado intercampaña, pero sí se pone sobre aviso respecto a los actos anticipados. En todo caso, lo que la ley sí define con claridad son los plazos en los que se deberán realizar las campañas. Y lo que se debe hacer durante las campañas simplemente no puede ni tiene por qué realizarse antes.

La ley señala, que las campañas son las actividades llevadas a cabo para la obtención del voto. Y los “actos de campaña son las reuniones públicas, asambleas, marchas y en general aquellos en que los candidatos o voceros de los partidos políticos se dirigen al electorado para promover sus candidaturas”. La ley también define lo que es la propaganda electoral, refiriéndose a ella como el conjunto de escritos, imágenes, expresiones, etcétera, que durante las campañas producen y definen los partidos políticos con el propósito de presentarlos a la ciudadanía.

Así, pues, lo que en este mes y medio no pueden hacer los partidos y los candidatos es lo que sí se podrá realizar durante el tiempo especificado para las campañas electorales. Desde luego, no les está vedado aparecer y expresarse en los informativos de radio y televisión, o entrevistas en cualquier otro medio. Lo que sí deberán evitar es llamar a votar por ellos o presentar propuestas con las que busquen promoverse entre los ciudadanos. Podrán sí, hacer cualquier diagnóstico que consideren respecto a la realidad nacional y tendrían derecho a cuestionar las políticas públicas del gobierno en turno. En este caso, resulta claro que pueden hacer todo aquello que no esté prohibido.

Ahora bien, la ley señala que durante las campañas se suspenderá, con algunas excepciones, la difusión en los medios de comunicación social de toda propaganda de los tres ámbitos de gobierno. Esto, desde luego sí se desarrollará durante este lapso previo a las campañas en donde veremos, seguramente, una cantidad desmedida de propaganda gubernamental. Es evidente la inequidad, porque esa propaganda sirve para apoyar al partido en el gobierno.

En otro orden, ha sido muy mencionado el asunto de la sustitución del titular de la Fepade. En realidad es algo que no debería preocupar a nadie y mucho menos llegar a rasgarse las vestiduras. Ello porque la Fiscalía no tiene dientes para proceder contra los delincuentes electorales y ha sido siempre una institución meramente ornamental.

 

 

 

Su nombre :
Su correo electrónico :
Sus comentarios :

 

La Quincena NÂș92


15diario.com