ANÁLISIS A FONDO
Otra vez Calderón
Francisco Gómez Maza
De nuevo en el proceso
La presidencia por un tuit
Ciudad de México.- Reincidente en sus intervenciones en el proceso electoral, cuando la ley se lo prohíbe terminantemente, el presidente Felipe Calderón volvió a las andanzas, ahora tratando de darle una ayudadita a su candidata incómoda, Josefina Vázquez Mota, quien continúa en el tercer lugar en las encuestas, a pesar de que muchos la dieron como ganadora del debate de anoche.
La nueva incursión presidencial en realidad la inició antenoche el presidente, durante el segundo y último debate, cuando no aguantó la indignación y posteó un tuit, argumentando en contra de la afirmación del candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, quien propuso que en su administración lograría un ahorro en el gasto corriente del gobierno de 300 mil millones de pesos, mediante el recorte del sueldo de los funcionarios de primer nivel.
Calderón escribió en su cuenta de Twitter que: “si el gobierno despidiera a todos los altos funcionarios, de director a presidente, ahorraría 2,000 mdp, no 300,000. ½ sueldo: 1,000 m.”
Y es que duele que la candidata del oficialismo no halle en camino, no sólo para remontar a López Obrador, sino para desplazar al priísta Enrique Peña Nieto de la primera posición. Y con posibilidades de que no sólo pierda, sino que quedé deshonrada, junto con su partido y el presidente, hasta el escalón más bajo del podio.
Con el cotorreo de anoche hubiera bastado. Los representantes de las izquierdas ante el IFE no habrían dado ninguna importancia a la intervención presidencial en el proceso Éste podría haberse interpretado como una reacción muy natural de un ciudadano, aunque en este caso haya sido el presidente de la república. Pero bueno. Se sintió aludido y respondió.
Ahora el mandatario está metido en otra camisa de once varas. Si así lo deciden los partidos que apoyan a López Obrador, pueden presentar una queja ante el Instituto Federal Electoral por considerar que nuevamente Calderón está intentando inducir el voto a favor de Vázquez Mota, como lo ha hecho en otras ocasiones. Ya en dos el IFE ha acordado que violó las leyes electorales, aunque por ser el presidente no ha recibido sanción alguna.
El tuit de antenoche podría ser utilizado por los partidos de izquierda para acusarlo ante el IFE de violar el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales. Pero tampoco era para tanto. Sin embargo, Felipe nunca se mide.
La elección presidencial a favor de la continuidad de su partido, el PAN, en el poder en la persona de Vázquez Mota, que se le escapa de las manos, le dio la pauta para aprovecharse de la propuesta de López Obrador y estar de nuevo en las páginas frontales de los medios.
Ayer mandó a su secretario de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña, a contradecir la propuesta de austeridad gubernamental de Andrés. Meade aseguró que, si el gobierno federal despidiera a todos sus servidores públicos, generaría un ahorro de sólo 264,000 millones de pesos, contra lo afirmado por el candidato presidencial de la izquierda sobre un plan para ahorrar los 300,000 millones mencionados, con medidas anticorrupción y reduciendo el salario de la alta burocracia.
“Si el gobierno federal prescindiera de todos sus servidores públicos, nos ahorraríamos esos 264,000 millones de pesos, de los cuales el 0.7% solamente está vinculado a los altos mandos”, dijo Meade durante el lanzamiento del Centro de Aprendizaje en Evaluación y Resultados para América Latina.
De gasto corriente, el gobierno federal destina 264,000 millones de pesos en sueldos, salarios y gasto del rubro de servicios personales, dijo Meade. "Un programa económico que descansa en la ficción o en el engaño ha sido el principal ingrediente de la tragedia griega que hoy estamos viviendo", apuntó.
Calderón, quien acudió al mismo acto que Meade, ya encarrerado, agregó que no basta con "buenas intenciones" para llevar un manejo correcto de los programas gubernamentales. Es necesario, también, obviamente, contar con el compromiso y la corresponsabilidad de los tres órdenes de gobierno”.
Cachazudo como es, López Obrador respondió ayer mismo a la “corrección” presidencial. Dijo que respeta la opinión del presidente
─“soy partidario de la libertad de opinión; necesitamos reconciliación”─ y que no iba a polemizar con el presidente. Tengo muy claras mis cuentas, lo expresé ayer”.
El candidato de las izquierdas insistió en que cuenta con la experiencia necesaria para la aplicación de políticas públicas y recordó los “logros” de su administración. Cuando fue jefe de gobierno del Distrito Federal, “ahorramos y así financiamos el desarrollo social. En ese cargo ganaba menos que un director de área del gobierno federal”.
Y ahí quedó la cosa. Qué le parece.
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