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1308 1 Mayo 2013

 

Tras el 1° de Mayo en Nuevo León
José Antonio Villalobos

Monterrey.- No es necesario saber todo en la historia de México, simplemente tener un poquito de memoria y referenciar los hechos con los contextos y así entender el por qué de las situaciones. Lo anterior viene a razón de que muchos jóvenes y otros tantos no tan jóvenes parecen antorchas humanas, dado el fragor de su discurso ante lo que consideran un atentado a sus derechos y buscan una forma de solución exponiendo públicamente su protesta o reclamo.

Ante tanta desesperación sucumben en las manos de profesionales del alboroto y la consigna política y social, que arropados por partidos políticos de toda filiación, les usan para sus fines siempre que hay un interés social fácil de capitalizar electoral o políticamente para agregarse militancia.

Ejemplo entre el magisterio: la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), que ya sé que lo van a negar, pero es más que sabido y documentado el vínculo más que ideológico, financiero, entre ellos y la profesora Elba Esther Gordillo Morales. El juego es muy sencillo. Elba debía mostrar músculo y oficio político, para ello usa la treta gastada pero funcional: crear un “aparente conflicto”, claro manejado de origen, para reivindicarse ante la opinión pública como el gran salvador(a) al tener únicamente él (ella) el argumento y la habilidad para solucionar el conflicto.

Así fue como desde la sección 36, origen político de Elba Esther, surge la CNTE; así fue como electoralmente la uso muchos años como contrapeso del PRI para aparecer como hábil negociadora; así es como parte del PRI (Murat en Oaxaca) aprendió a usarles y arrebató el control por lo menos regionalmente para sus propios intereses, y más recientemente la izquierda fracturada busca asirse para sí mismos una facción de los maestros por ser de utilidad como choque social para lograr la negociación de lo que sea, y así ser ellos los fuertes, buenos y honestos del conflicto, impulsado o capitalizado por ellos mismos.

Pues ahora resulta que el escenario se ha complicado un poco, la mano que les mantenía ya no está (visible o libre para operar por lo menos), se ha complicado porque existe (aunque se niegue) un vacío de poder en la cúpula del SNTE, y entonces en la CNTE deben redirigir su ataque, y peligrosamente algunos de los actuales dirigentes del CEN del SNTE ven la oportunidad de reproducir, repetir, la estrategia que alguna vez Elba fue capaz de lograr, y apuntalarse de esa forma como pieza fuerte dentro del CEN del SNTE; otro escenario es que los partidos quieren hacerlo propio, pues saben del capital humano que les representa ese filón social.

Lo preocupante del hecho en sí, es que ellos se presentan, como siempre, como grupos libres, como autentica representación de la base, sin compromiso con grupos del poder para engañar y atraer militancia o simpatía, y más preocupante es que el estado ha dado muestra firme de que el viejo autoritarismo ha vuelto, pero tampoco cae en el juego de ellos, dándoles un mártir político y social que es lo que le urge ahorita al “movimiento magisterial”, que se dicen infiltrados por agentes de gobernación o del sistema, pero no aceptan que están de verdad reforzados e infiltrados por grupos supuestamente de autodefensa comunitaria que más bien son guardias blancas del crimen organizado.

Pero qué argumentan si no lo mismo, el SNTE no hace esto o lo otro, el gobierno nos afecta con X o con Y situación, son las misma consignas de cada tres y cada seis años, simplemente adecuan su pregón al conflicto en boga, que ahora son las reformas laboral y educativa. Desestiman y desacreditan al SNTE y a cualquier otro individuo que no coincida con su discurso, banalizan incluso y luego se desmarcan del hecho, se dicen abiertos al diálogo y a consensuar, pero buscan sólo imponer su punto de vista, se muestran como los tres changuitos, no escuchan, no ven, no hablan, sólo repiten una y otra vez su discurso bien adoctrinado contra las instituciones y el gobierno.

Cierto es que es necesario que se revisen los términos en que finalmente quedarán lo que hoy sólo son iniciativas de ley para la aplicación de la Reforma Educativa; cierto es que se percibe mala intención y dolo al hacer las cosas al albazo y sin consensuar abiertamente al gremio como se simula hacer con los foros regionales de consulta en vistas al plan nacional de desarrollo 2012-2018. Alguien dijo con certeza que llegan a los eventos regionales con oradores y participantes todos ellos de la Ciudad de México y restringen al máximo la participación de especialistas de cada región. Eso es una simulación y querer engañar al pueblo, pero con el magisterio ni a eso llegan siquiera.

La invitación es a que impere la cordura, que no sea presa fácil de un grupo que está urgido de militancia para poder consolidarse como un partido político ya que apenas están registrados y reconocidos como A.C., Morena. Léase con todas sus letras, que al parecer está de acuerdo con cierta fracción o miembros de la dirigencia nacional del SNTE y por ello tiene todas las facilidades, incluso apoyo para operar, por ejemplo aquí en Nuevo León, donde desde algunas oficinas de la Secretaría de Educación, otras oficinas del SNTE, se giran instrucciones, apoyos, para que este 1° de Mayo salga un fuerte movimiento a las calles, pero ese gobierno, ese “estado” autoritario no se va a permitir perder el estado de Nuevo León y seguramente sabe ya que habrá entre sus filas contingentes del SME, de profesores provenientes de Guerrero, contingentes de telefonistas y obviamente los escasos militantes de Morena y el PRD. Entonces habrá vigilancia para que no logren en Nuevo león, lo que no han logrado aún en Guerrero y Oaxaca: un mártir, una víctima social, que tanto le urge “al movimiento” para catapultar la intensidad de sus protestas.

Si piensa asistir, si decidió por convicción caer al engaño de esos grupos, por lo menos no lleve a sus niños, y sea parte del contingente, si acordaron un color en común, vaya así y no diferente, para que el mismo contingente le reconozca y le proteja.

Si algo anda mal, si algo se debe mejorar, no es ofendiendo a terceros, no es afectando al ciudadano común, no es vendiendo su voluntad a baratos intereses políticos. No es así como se logra el cambio. Si algo debe mejorar, somos nosotros mismos desde el interior, somos nosotros mismos en nuestro entorno, somos nosotros mismos fortaleciendo las instituciones, unificándonos y esforzándonos por el bien común, no de unos cuantos, no beneficiando a una cúpula que hábilmente usa al individuo para fortalecerle a la vez que éste ilusamente creé que lo ataca. Piense bien y verá a quién le hacen el juego.

 

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