HORIZONTE CIUDADANO
Entre el delito y el horror
Rosa Esther Beltrán Enríquez

Saltillo.- El Instituto para la Seguridad y la Democracia A.C. (Insyde) presentó los resultados de una investigación independiente sobre el Instituto Nacional de Migración (INM); se trata de un diagnóstico sobre el INM y es el primer estudio integral que se ha elaborado en México sobre ese instituto.

El Diagnóstico del Instituto Nacional de Migración: Hacia un Sistema de Rendición de Cuentas en pro de los Derechos de las Personas Migrantes en México, analiza los procedimientos y las prácticas del INM y sugiere medidas para fortalecer la transparencia y la rendición de cuentas.

Según le ley,  “el INM es  el responsable de la gestión de la migración pero hasta ahora se ha caracterizado por el hermetismo y la opacidad institucional, lo cual contradice su obligación legal de transparentar e informar acerca de su desempeño, al mismo tiempo el INM obstaculiza la construcción de mecanismos que favorezcan la transparencia, el acceso a la información y la rendición de cuentas” manifiesta el Insyde.

Sonja Wolf, expositora e investigadora en el Diagnóstico subrayó que en México es incipiente el debate sobre las alternativas a la detención de los migrantes indocumentados, ya que al ingresar éstos irregularmente al país, no cometen un delito sino una falta administrativa y no deberían ser privados de su libertad, sin embargo, aseveró Wolf, en México hasta la fecha, la detención migratoria y el uso de la fuerza son la norma y el INM no cuenta con un protocolo que regule esas prácticas por parte de sus servidores públicos.

La investigadora del Insyde y del Colegio de la Frontera Norte presentó las fallas que se encontraron en el INM que no cuenta con programas para apoyar a los migrantes ni con políticas para la repatriación de connacionales expulsados de Estados Unidos, lo que sí es comprobable es la corrupción en estructuras supuestamente creadas para la protección de indocumentados, por lo que es clasificado como un “organismo público en extrema descomposición”.

El documento de investigación sobre INM supera las 500 páginas y en él queda documentada la precariedad de  la política de migración y se  establece sin lugar a dudas los déficits estructurales que ponen bajo sospecha su funcionalidad, se agrega que el INE adolece de una cultura institucional y armónica de los derechos humanos; mantiene prácticas cotidianas de falta de atención y mal trato a migrantes e incluso con presunta vinculación con la delincuencia organizada, por lo que se califica al INM como un aparato en evidente descomposición; lo anterior implica para el Insyde proponer, de entrada un rediseño normativo para el establecimiento de nuevas políticas institucionales, la implantación de un sistema de rendición de cuentas, de supervisión y control, así como la instauración de protocolos diversos; se enfatiza que el estudio desnuda, la distancia y contradicciones entre lo que el Instituto debe ser y lo que es. El INM es una entidad pública en muchos sentidos dejada a su suerte. ¡Más claro, ni el agua!

Además, por si fuera poco, el Diagnóstico enfatiza que, en los hechos no existe un instrumento de gestión pública del gobierno de la República que sustente el respeto irrestricto a los derechos humanos de los migrantes para que pueda ejercerse una política migratoria bajo los principios de hospitalidad, solidaridad y equidad entre nacionales y extranjeros.

En base a las pruebas tan contundentes del Diagnóstico, el sacerdote Pedro Pantoja lanzó una propuesta igualmente terminante, “que desaparezca el INM”,  porque sólo es un “perro de presa” en contra de los ciudadanos centroamericanos que transitan por México.

El asesor de Belén, Posada del Migrante de Saltillo tiene razón, al entrar a este País los  migrantes exponen su vida, es la violación para las mujeres y los niños, las golpizas, los secuestros, los asesinatos, la trata de personas, un tránsito de horror, es la indefensión absoluta, la vulnerabilidad extrema. Institucionalmente es un vacío al que hay que poner un hasta aquí.

Posdata
Rubén Moreira informó que gastó en 2013, 948 millones de pesos en publicitar a su gobierno, casi mil millones en anunciarse como distinguido protagonista de cercenar listones. Lectora, lector, usted juzgue si es poco o es mucho, le dejo la palabra.