México: un país desconectado
Eloy Garza González
Monterrey.- Que nadie se preste a engaño. El gobierno de Nuevo León no tiene una estrategia digital para el Estado. Los videos del gobernador colgados de Facebook son una iniciativa personal, loable porque carecen de guión y destilan espontaneidad, pero no se trata ni de lejos de una política pública. Ningún gobierno estatal ni el federal tienen ningún plan.
Cuánta diferencia con gobiernos de otras latitudes como el Reino Unido, donde cada segmento de la vida económica está digitalizada, desde las compras en línea (contratos entre particulares en todos los rubros), hasta la forma como viajan los ingleses y gestionan sus servicios de salud.
El Reino Unido es una nación con una economía digital plena, en la que 80 por ciento del gasto medio personal pasa por e-commerce. Pensar que esta revolución es resultado de la cultura inglesa (para algunos paisanos acomplejados más evolucionada que la nuevoleonesa y que la mexicana), es asumir una perspectiva malinchista. El Reino Unido se subió a la ola digital hace apenas cinco años. En ese lapso, creó el entorno adecuado y la tecnología de punta para proteger e incentivar los negocios en línea. Al mismo tiempo, en México se hacían del conocimiento público compras de casas blancas y jugosos contratos ilegales en Pemex y la CFE. Así no se puede. Las comparaciones son odiosas pero también deprimentes.
Es común confundir la estrategia digital para todo un país, con otras iniciativas (estas sí exclusivamente gubernamentales) como el Gobierno Abierto. No son la misma cosa. Que un gobierno estatal tenga una buena página web y que su manejo sea bidireccional, es un logro transitorio (la tecnología cambia constantemente y demanda actualización periódica). Pero que la sociedad cuente con canales digitales para compartir entre particulares, es un asunto muy diferente. ¿A qué me refiero? A volver accesible para los educandos a los mejores educadores del mundo; a que la consulta a distancia que se brinde a pacientes sobre todo niños y ancianos, sea expedita; a que podamos denunciar robos o asaltos en forma inmediata y efectiva.
Más que envidia, la estrategia digital del Reino Unido debería ser fuente de inspiración para nosotros. Pero el político mexicano (salvo honrosas excepciones) es un rotundo ignorante en materia tecnológica, incompetente y concentrado solo en el próximo latrocinio, desvío de recursos públicos o tráfico de influencias.
Se da incluso el caso de gobernantes mexicanos que han querido poner freno al desarrollo digital, restringir las redes sociales y frenar el libre acceso a la red y la conectividad. En esta, como en muchas otras materias, en México vamos en reversa.
