Sabina Spielrein
Ismael Vidales Delgado
Monterrey.- En este episodio de la historia de la psiquiatría, Sabina Spielrein es atendida por Carl Gustav Jung en el Hospital Psiquiátrico Burgholzli de Zurich...
...del 17 de agosto de 1904 hasta el 1 de junio de 1905, dirigido por el eminente médico Paul Eugen Bleuler. Sabina llega con un diagnóstico de esquizofrenia o locura histérica.
Jung es muy joven y Sabina tiene apenas dieciocho años y una biografía infantil cargada de enfermedades físicas y trastornos emocionales, que se agravan a los catorce años con la muerte de su hermana. Sus padres, justificadamente preocupados por su salud, deciden internarla en el Hospital en 1904.
Jung recibe a Sabina en plena crisis. En ese tiempo sentía gran admiración por el médico judío-vienés Sigmun Freud, a quien le estaba enviando un breve trabajo sobre la asociación de palabras.
Inició de inmediato el tratamiento de Sabina y para abril de 1905 parecía haber solucionado el caso, incluso ella se había inscrito en la Universidad de Zurich para estudiar medicina.
Sin embargo, Jung ocultaba la verdad y no sabía cómo seguir tratando profesionalmente el caso, así que decide enviarle una segunda carta a Freud (la primera fue para remitirle su trabajo) el 26 de octubre de 1906 pidiéndole asistencia e incluso supervisión personal del caso, pues lo que ocultaba era su relación médico-paciente, que había llegado a convertirlos en amantes. Jung era casado y tenía hijos.
Cuando Jung no puede ocultar su romance con Sabina, simplemente lo niega y Sabina se siente traicionada. La esposa de Jung había escrito a la madre de Sabina pidiéndole que la persuadiera de seguir viendo a su esposo. Jung, en un comportamiento de poca hombría acusó a Sabina de ser "una paciente traidora que le había sacado hacía años de una grave crisis y que ahora le pagaba así, porque él le había negado el placer de darle un hijo". Sabina, en tanto había escrito a Freud pidiéndole una entrevista y ayuda por el comportamiento de Jung.
Freud contesta con evasivas y le dice a Sabina que tal vez se trate de "un fervor excesivo en el tratamiento". Más que prudencia de Freud en la relación sentimental de la pareja, parece ser que Freud tenía mucho interés en que Jung expandiera su teoría sobre el psicoanálisis en Suiza y Europa, donde gozaba de alto prestigio. Esto me lleva a suponer que Freud y Jung, le jugaron sucio a Sabina.
Jung se separó de Freud en 1914, después de que en 1911 lo hicieran otros seis miembros del grupo vienés. Fue entonces que Freud dio la razón a Sabina y la invitó a ingresar y participar en las reuniones de los miércoles de la sociedad psicoanalítica de Viena.
Sabina concluyó su carrera de psiquiatría en 1911, se casó con un médico de nombre Pavel Naumovich Scheftel y tuvo dos hijas. Ejerció como terapeuta en Ginebra (Suiza), entre 1917 y 1924 en el laboratorio de Eduard Claparede. Entre sus pacientes se cuenta Jean Piaget, en 1922. Luego emigró a Rusia, donde fundó un centro psicoanalítico de atención de niños, permaneció hasta 1934, cuando Stalin tomó el poder, habiendo trabajado al lado de los célebres lingüistas Alexander Luria y Lev Seminóvich Vygotsky.
Su esposo desapareció durante la Gran Purga de 1936, Sabina fue fusilada en 1942 por las fuerzas nazis que ocupaban la Rusia de Stalin junto a sus hijas (Renate, nacida en 1912 y Eva, nacida en 1924), en su ciudad natal Rostov, junto a cientos de hebreos más, frente a una sinagoga.
El director de cine David Cronenberg estrenó en 2011 A Dangerous Method, (Un método peligroso) la adaptación al cine de una obra de teatro de 2002 de Christopher Hampton. La película trata de las relaciones profesionales y afectivas surgidas entre Sabina Spielrein, Carl Gustav Jung y Sigmund Freud. Sus protagonistas son Keira Knightley (Spielrein), Michael Fassbender (Jung) y Viggo Mortensen (Freud).
Puede ver la película completa en http://www.youtube.com/watch?v=aaW10wOQKoc
