MALDITOS HIPSTERS
Dónde están los nobles
Luis Valdez

Monterrey.- Un periódico de estilo de vida en Monterrey proclama a la película “Nosotros los nobles” como un claro reflejo de la juventud inútil. Más bien es un reflejo del tipo de lectores, “ciudadanos inútiles”, al que va enfocado un periódico.

Esta semana me ha tocado visitar una Prepa Tec para checar una feria de libro. Los alumnos de escuelas privadas también leen cosas por gusto. Ya sea en inglés o en español (claro, ellos son bilingües). En cambio, los de escuelas públicas leen con aversión. No me parece raro, si a los mismos maestros de escuelas públicas no les agrada leer.

Veamos los puntos en común de los estudiantes: si los de escuelas públicas tienen tv en su casa, mínimo llegan a ver Mario Bezares o Chavana. En cambio, para los de escuela privada es común que tengan tv por cable. ¿Con más razón deberían gastar su tiempo en la tv, no? La tv es pérdida de tiempo para la lectura, pero se supone que lo millonarios tienen más tv a su alcance. Además los de clase alta tienen más ocupaciones sociales: deben ir a sus eventos en el club o salir de vacaciones al extranjero, o campamento de verano. Y los de escuela pública casi nunca tienen posibilidades de salir de viaje. Entonces se supondría que tienen más tiempo para leer en vacaciones. Esto recordando que es ilegal el empleo para los menores de edad.

Ya sé que suenan muy al vuelo mis comparaciones, pero mientras que unos le echamos la culpa (de la falta de afición a la lectura) a los maestros, ellos le echan la culpa al entorno familiar. Pero, oigan, en la casa está la niñera, la caja idiota, la entretenedora enemiga y se supone que en la escuela no hay tv.

¿Por qué no hay una hora de estricta lectura en las escuelas públicas? Y me refiero a lectura constante y comprensiva, no a copiar la lección de la página 10 a la 15, mientras la maestra, que sueña más con su escalafón magisterial que con la didáctica perfecta, hace el trabajo de su maestría para meter puntos su registro.

Estos alumnos de escuelas privadas que leen, son los jóvenes inútiles (que dice la sección “Vida”) porque muchos nunca trabajarán, con la sensación de tener un jefe a punto de correrlos. Heredarán la empresa familiar y se pasarán las vacaciones a la orilla de una alberca leyendo el best seller de la temporada. Es lectura vacía porque en su entorno social no hay necesidades.

En cambio, en donde sí hay necesidades, no hay lectura. En los entornos familiares donde la lectura de un libro puede cambiar las cosas a nivel social, simplemente los libros no existen, y lo peor, son repudiados. Nos hemos puesto la soga al cuello. Por eso Sanborns vende más best sellers que libros de crónica y periodismo: porque a los que leen, no les importa si lo que leen sirve de algo.

¿Dónde están los nobles? Están leyendo un libro (ellos sí fueron educados para leer libros). Lástima que sea puro libro inútil.