Cansados de las ratas de dos patas
Lilia Arellano
Cancún.- El rechazo de la población a la clase política del país y el descontento con la actuación de los partidos políticos está generando en México el surgimiento de candidatos animales que ofrecen “no robar” ni “destruir a la nación.”
En la elección del nuevo alcalde de Jalapa, Veracruz, surgió el “el candigato Morris”, cuyo slogan es “No más ratas”, y cuenta con el doble de seguidores en su página de Facebook que los del candidato priísta Américo Zúñiga.
También en Ciudad Juárez, Chihuahua, el candidato por la alcaldía es un asno, el “Burro Chon”, quien ya había competido en 1982 contra Francisco Barrio Terrazas, y fue objeto de una guerra sucia por parte del gobierno panista que difundió que había una epidemia equina y que tal vez podría contagiarse a otros animales.
La epidemia que realmente cundió fue la avaricia y el saqueo de las arcas públicas.
En la ciudad de Oaxaca, Oaxaca, surgió un nuevo aspirante a la presidencia municipal de la capital del estado, un perro San Bernardo de nombre “Titán”, que se hace llamar el “CANdidato” y que es “el único que te confiesa que sí va por el hueso. Yes we Can”. El creador de este aspirante independiente asegura que tiene la finalidad de contar con una voz que diga “ya basta” o un “no la chinguen con sus candidatos ratas”.
La ciudad de Puebla también tiene una felina, llamada “Maya”, que se postula a la alcaldía de la capital del estado y comienza a tener miles de seguidores. “La candidata Maya no promete transformar a Puebla, pero al menos no la va a seguir destruyendo”, señala su propaganda que insiste: “al igual que tú estoy cansada de tantos ratones de la clase política. Quiero un futuro mejor”.
Una candigata mas es “Tita”, la cual está postulada a gobernar el municipio de Misantla, Veracruz. “Mufin” es otro candigato a la alcaldía de Orizaba; y en el municipio de Cerro Azul acaba de iniciar campaña la “candigata Peluzza”.
Este fenómeno de rechazo a la clase política no es nuevo. Hay antecedentes en 1938, cuando en la ciudad de Milton, ubicada en Washington, ganó una mula de nombre Boston Curtis, y formó parte del comité en dicho estado.
En Brasil, un rinoceronte de nombre “Cacareco” fue postulado a la alcaldía de Sao Paulo, pero a pesar de recibir 100 mil votos, su candidatura no fue aceptada por las autoridades electorales. El rinoceronte ganó las elecciones en sentido práctico y generó un fenómeno social denominado “voto cacareco”, que son las votaciones anuladas en el país sudamericano.
En el 2009, en México, tuvo auge la campaña de “Fidel”, un perro de raza pitbull, el “candidato de la perrada”, que nació para fomentar el voto nulo en Jalisco y cuyo blog sirvió como lugar de denuncia de irregularidades en esa entidad.
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