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1512 11 Febrero 2014

 

MALDITOS HIPSTERS
Guerra de camiones y taxis
Luis Valdez

Monterrey.- A los que no estamos sindicalizados con la CTM o la CROC, nos vale que tengan sus envidias por enjuagues políticos donde la tarjeta FERIA y la plaza de la Central de Autobuses son sus huevos de oro. Los usuarios nuevamente estamos en medio de un fuego cruzado, ahora de agremiados y líderes sindicales.

Crónica
Hace una década tenía la facilidad de salir de viaje cada tres meses. En uno de mis retorno pregunté a un taxista justo en la puerta de la Central de Autobuses:
–Voy para El sur de la ciudad. Garza Sada.
A lo que el taxista sin pensarla me soltó:
–¡Doscientos pesos!
–¡Ah, caray… me cuesta sesenta y nunca pasa de ochenta!
–¡Cobramos doscientos!

Caminé un par de metros hacia la avenida y abordé un taxi sobre Colón… me cobró 65 pesos.

Y es que han sido clásicas las peleas a brazo partido entre los taxistas que entran a la Central de Autobuses y los que se estacionan afuera. Territoriales como pandillas, como cárteles, como sindicalistas.

Rumor
Se esparce el rumor de que la tarjeta FERIA fue un arreglo entre la CTM y el gobierno. Luego algunas rutas de la CROC se niegan a admitir los dispositivos y hasta se atreven a cobrar menos. En lugar de los 9 pesos que cuesta el pasaje con la FERIA (y que ahora sale a 10), porque el pago normal es de 12 pesos.

Tarjeta impuesta para un cobro impuesto. Dos pesos que se pagan extra por no querer gastar veinte pesos en comprar una tarjeta.

Guerra
Han comenzado a recoger las unidades que no cobran con tarjeta FERIA, argumentando que ya están en muy malas condiciones. Esto resulta irónico, cuando algunas rutas que cobran con FERIA están igual de malas. El líder de la CROC contraataca diciendo a los medios que si las medidas siguen, hará bloqueos en municipio con todos sus taxistas agremiados, los cuales son cientos o hasta miles.

Esto ocasionaría un caos en la ciudad. Y todo por una guerra que a los usuarios no nos importa. Nosotros sólo queremos precios más económicos, mejores condiciones en el transporte público y un mejor servicio tanto de tiempos como del personal. A final de cuentas es su trabajo y todo trabajo requiere de profesionalismo.

Pero puede que el meollo del asunto es que nadie les exige profesionalismo ni responsabilidad para con la sociedad en general a los sindicatos.

Sí, en la guerra siempre hay víctimas colaterales.

 

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