HORIZONTE CIUDADANO
Esquizofrenia en derechos humanos
Rosa Esther Beltrán Enríquez

Saltillo.- Por fin alguien le colocó los puntos sobre las íes al gobierno federal y al estatal. Con mucha claridad, pero con diplomacia, el secretario general de Amnistía Internacional (AI), le presentó a Enrique Peña Nieto en un memorándum la realidad que viven las familias de los desparecidos y los migrantes en México y en particular en Coahuila.

En efecto, Salil Shetty visitó por primera vez Saltillo para revisar personalmente la situación que  se vive aquí en materia de derechos humanos; y frente a los innumerables sitios de graves conflictos que México enfrenta en este tema, eligió el Albergue Belén, Posada del Migrante, como una opción preferencial para  entrevistarse y escuchar de viva voz a los centroamericanos que el sábado estaban en el Albergue y a las familias de los desparecidos organizados en Fuundec.

Shetty considera como alarmante la situación de inseguridad y violencia que prevalece en el país, pero además agrega que el sistema de justicia continúa defraudando a las víctimas y reconoce que el gobierno federal ha hecho mucho en materia de reformas económicas y políticas; pero sostiene: “Sin embargo, han brillado por su ausencia los compromisos públicos y las acciones decisivas en derechos humanos”. Por lo que el  secretario general de AI no duda en clasificar la situación de México en esta materia como una “crisis en derechos humanos”.

En su memorándum, Salil Shetty menciona a Coahuila entre los estados en los que la violencia, la inseguridad y las violaciones a los derechos humanos son una amenaza diaria para la población y reciben poca atención por parte de las autoridades y de los medios de comunicación.

Al referirse a la situación de los migrantes enfatizó que éstos siguen padeciendo abusos a manos de las policías; muchos son víctimas de secuestro, de trata, abuso sexual u homicidio por parte de las bandas criminales, que con frecuencia operan coludidas con las autoridades locales. La Estrategia Integral para Combatir el Secuestro de Migrantes no ha llevado a la justicia a los criminales ni a las autoridades que actúan en colusión con éstos, lo que denota el fracaso del Estado de derecho.

En el documento también se denuncian las intimidaciones y amenazas con las que se acosan a los defensores que apoyan con su trabajo a los albergues de migrantes.

Vanguardia informó que, efectivamente, los migrantes siguen padeciendo una alta incidencia de detenciones arbitrarias y tortura por parte de elementos de la Policía Municipal; el director del albergue denunció que en 2013 documentaron  42 casos de migrantes detenidos injustamente y este año se han registrado 12 casos de tortura sin que haya sanción alguna para los agentes que inciden en esta práctica; por su parte, el secretario de AI señala que los funcionarios deben abstenerse de criminalizar a los migrantes, además de aplicar otras indicaciones acerca de las mujeres y niños migrantes.

También el documento dedica una dura crítica acerca de la indefensión de periodistas y defensores de derechos humanos a causa de la ineficacia de las  leyes e instituciones que carecen de personal calificado, recursos y apoyo político de alto nivel para asegurar las medidas de protección. El memorándum finaliza con el análisis sobre los derechos humanos de las mujeres y los de los pueblos indígenas.

La visita a Saltillo del secretario de AI es un referente ético y social, la perspectiva de esperanza para los migrantes y los desaparecidos en Coahuila por su vulnerabilidad; la atención hacia ellos no es gratuita, porque tienen la capacidad de exigir la atención a sus derechos humanos. En cambio, lo que muestran los gobiernos, el estatal y el federal, es insensibilidad y falta de voluntad política.

Por la posición que ocupan, los funcionarios públicos, sobre todo el Ejecutivo, no pueden equivocarse ni cometer errores, por eso es inaceptable que Rubén Moreira manifieste que, “aunque existe la disposición para trabajar con las asociaciones en la búsqueda de personas, no existen acciones tangibles para entregar resultados”; es su responsabilidad indeclinable construir esas acciones y si no puede, que renuncie, no se aceptan disculpas.

Mañana estará en la posada del migrante y con Fuundec un enviado de la ONU y acudirán representantes de las organizaciones civiles de Torreón y de Monterrey; de nuevo será Saltillo la opción preferencial de esta visita. Que quede claro, no se aceptarán disculpas que impidan alcanzar los derechos humanos que se exigen, porque en la gravedad de las violaciones les va la vida a estos grupos vulnerables.

De nada nos sirven muchas leyes, pero una realidad en la que no se aplican. Esa es la esquizofrenia de los derechos humanos.