Instructivo para candidatos inexpertos
Eloy Garza González

San Pedro Garza García.- Muchos políticos, lo mismo panistas que priistas, además de los independientes, comienzan a aparecer como candidatos a gobernador o alcaldes. Todos lo hacen a su leal saber y entender, con mayor o menor fortuna; varios caen en egolatrías y difusión de lugares comunes.

Sin que lo tomen como consejo –el periodismo critica, no aconseja– sería conveniente revisar cinco grandes estrategias para evitar que estos candidatos hagan el ridículo ante los electores. Los enumero sin orden de prelación.  

1.- No te construyas una imagen de renegado, pero se un outsider. Es decir, más vale pedir perdón a pedir permiso. Claro, el asunto es que en Nuevo León, panistas y priistas tienen en su ADN la cultura de la línea. La disciplina no es una camisa de fuerza, no es un freno de mano, es sólo represión mental, prejuicio político de candidatos timoratos o anquilosados.

2.- La elección no es sobre ti; es sobre la gente. El mal político impone su agenda a la gente, cuando lo esperado es que refleje la agenda de la gente. Así, el político urbanista creerá que lo urgente para los nuevoleoneses es la obra pública. Y para el abogado, lo vital serán las reformas legales. Y si un candidato fuera bombero lo urgente para él sería el combate de los incendios. Desde luego no omito que la mayoría de los políticos son expertos en nada, así que la agenda se la imponen los medios de comunicación.

3.- Descubre la principal situación social y enfoca tu campaña en ella. Diseñar una agenda temática de campaña no consiste en enumerar largas declaraciones temáticas. El nombre del juego no es soltar decenas de promesas sino detectar situaciones. El candidato más listo descubrirá la situación central, que flota en el ambiente social. A ese hallazgo le llamaré kairos, que para los griegos implicaba saber operar las oportunidades. 

4.- No te preocupes por el financiamiento. Con una buena campaña, el dinero fluye solo. Si detectas con anticipación la situación social y presentas un programa electoral sui generis, el dinero fluirá solo. No faltarán donantes. Tu tarea será más bien saber con quién te juntas y haces alianzas con las personas correctas. Evita los personajes polémicos; pero también recuerda que si no encuentras en tu equipo de campaña un personaje polémico, no lo busques más: el polémico eres tú. 

5.- Olvídate de difundir las maravillas de tu currículum, la gente quiere solución a sus problemas, no la remembranza de tus andares burocráticos o profesionales. No apeles a tus antecedentes curriculares para ganar una contienda electoral. Menos si tus orígenes son controvertidos. En Nuevo León el oficio de diputado local y federal, así como el de alcalde está desprestigiado. Igual pasa con el funcionario público en general. Sin embargo, queda demostrado que ser gobernador de Nuevo León, por ejemplo, es el único empleo donde el currículum vite actúa más en demérito que como requisito indispensable para ganar la candidatura.