DISPARATES
¡Bah!
Armando Hugo Ortiz

Monterrey.- El resultado de la investigación sobre la FIFA en 2015 se divulgó de manera espectacular: varios de sus directivos apresados aflojaron el cuerpo y la sopa, denunciaron a sus cómplices, sobre quienes pende amenaza de arresto. Tampoco se descarta una ruptura del poderoso monopolio del futbol mundial.

Papers Panamá es mucho más espectacular, de entrada hay 150 posibles defraudadores fiscales en sus respectivos países; con un millón de documentos en espera de divulgarse, nadie sabe cuántas alimañas salgan a la luz pública.

Sin embargo, hasta el momento no hay arresto alguno, salvo la renuncia del primer ministro de Islandia.

La diferencia es entendible, lo de la FIFA fue una investigación sigilosa del gobierno de los EEUU, con la cooperación de otros gobiernos, en especial el de Suiza. Mayor sigilo tuvo lo de Panamá, pero estuvo a cargo de un grupo de periodistas independientes. Ellos aclaran que el resto corresponde a los países potencialmente afectados, que poseen las herramientas jurídicas adecuadas.

Ahí es donde la puerca torcerá el rabo, pues aparecen en la lista  funcionarios gubernamentales. A lo mucho, la información se está utilizando para que los ataquen sus enemigos políticos.

¿Cooperará Estados Unidos? No, Obama ya marcó la pauta; a diferencia de la FIFA, declaró ayer martes que: “Muchas de esas maniobras fiscales son legales, ese es el problema”. Pero hay otro motivo implícito: entre los corruptos aparecen varios de sus “muchachos”, encargados de implantar el liberalismo económico en Argentina, Brasil, Venezuela y Perú.

Situación especial la de México, a leguas se les nota la cara de ¡Bah! a los enlistados, cuando declaran a la prensa que todo fue legal. Salvo algún enemigo de Peña Nieto, ya tienen el perdón todos, inclusive quienes aparezcan después.   

Corren más peligro los periodistas mexicanos que participaron en la investigación.

a_hugo16@hotmail.com