¿Envidia en el trabajo?
Gerardo Luis Palacios
Guadalupe, Nuevo León.- Omar López, experto en desarrollo organizacional, recupera algunas ideas asociadas a la envidia, y dice: “Tan antigua es la envidia que Aristóteles escribió: 'Es un dolor causado por la buena suerte de alguien que se nos asemeja'; Kant la expresó como 'la tendencia a ver con dolor el bien de los demás, aun cuando éste no acarree ningún daño para nuestro bien'.
El sociólogo Francesco Alberoni explicó el origen del mal en su libro Los envidiosos: 'Deseamos lo que vemos. Ser como los demás, tener todo lo que tienen los demás, pero si no tenemos éxito, si la confrontación nos pone en situación desventajosa, nos sentimos disminuidos, desvalorizados, vacíos… El mecanismo de defensa, este intento de protegernos mediante la acción de desvalorización, es la envidia.”
López destaca la opinión de Miguel Tapia Velazco, quien afirma que 'la envidia no es un sentimiento útil en el entorno laboral, porque su carácter negativo origina desilusión e intentos de sabotaje de los logros ajenos. Envidiar el puesto de otras personas origina una competencia malsana, porque no se busca destacar, sino minimizar o nulificar los logros de otras personas.' Karla Bayly nos recuerda que Hannibal Lecter en “El Silencio de los Inocentes” la describe magistralmente [a la envidia] cuando dice que comenzamos a envidiar aquello que vemos todos los días… hasta que en algún momento simplemente deseamos poseerlo.
En el Libro II de la Retórica, –expone Fernando Soler,– Aristóteles abunda sobre la envidia:
Sentimos envidia hacia nuestros iguales; no con la idea de obtener algo sino porque otra gente lo tiene.
Sentimos envidia, incluso si la fortuna está de nuestro lado, si pensamos que alguien toma algo que nos pertenece (celos).
Envidiamos a nuestros rivales en el deporte o en el amor, en general, aquellos que hacen las mismas cosas que nosotros. No envidiamos a los que en opinión de otros están muy por debajo o por arriba de nosotros. Ni envidiamos a los que vivieron hace siglos, a los que están por nacer, a los muertos o a los héroes.
Los ambiciosos son más envidiosos que los que no lo son.
Los hombres de mente pequeña son envidiosos porque todo les parece grande.
Además, le atribuye a San Pablo: Contra la envidia, Caridad.
Cultura organizacional… noción relativamente nueva y ajena a la experiencia inmediata, que de pronto mueve a rechazo por parecer dos palabras contradictorias juntas. Pero, una vez repasadas y repensadas algunas lecturas, nos dejan ideas y enseñanzas interesantes.
Carlos Mora, en 'Liderazgo, envidia e idealización' aborda de frente el impacto negativo que puede provocar el sentimiento de envidia en un entorno laboral. Comienza por establecer que para los agentes del cambio (profesores, líderes, gerentes) no pasa desapercibido el escenario (escolar, social, laboral) de gran complejidad por la 'jungla de valores, costumbres y hábitos' diversos, disímbolos y [hasta] contradictorios, que, siendo sociales por definición, pueden incubar sentimientos antagónicos que se convierten en obstáculos para el desarrollo normal de las actividades de una empresa o institución.
Plantea que el análisis que debe hacer el liderazgo consiste en reforzar los valores, encontrar otros que sean comprensivos e incluyentes de la nueva diversidad de maneras de pensar y actuar y que sean incluyentes de una diversidad cultural que es predominante en las sociedades contemporáneas y que atiendan, a su vez, las nuevas necesidades planteadas por la diversidad misma, 'este escenario se refleja en las organizaciones donde dirigir el cambio de comportamiento ha sido un gran desafío para los individuos, puesto que deben buscar una técnica para mediar entre valoraciones antagónicas que el líder no puede ni debe ignorar'.
Dice que es imprescindible, en el estudio y evaluación de la cultura de las organizaciones, no pasar por alto la generación de mitos y héroes que reflejan aspectos simbólicos que ostentan y proyectan las comunidades humanas, de cierta manera estables en su interacción, por periodos prolongados de tiempo. El mito, retomando a Rocha (Qué es el mito; 1991) 'es una forma en que las sociedades reflejan sus contradicciones y expresan sus paradojas, dudas e inquietudes'. Afirmando Carlos Mora después, que si las organizaciones continúan alentando a sus miembros para que visualicen sus líderes como héroes y mitos, 'se instauraría el clima de envidia con todos sus componentes destructivos'.
Por su parte, Celis Maya considera que el carácter de un líder principalmente se basa en el autocontrol emocional pues, 'debido a que un líder es una persona común y corriente, y debido a que un líder sabe que puede tener altibajos emocionales y pasar dificultades y momentos duros en su vida, la habilidad que más a desarrollar llegan [si quieren continuar siendo líderes] es la inteligencia emocional. De igual manera, puede que un líder sienta envidia, avaricia, codicia o egoísmo…pero a la hora de tomar decisiones y de guiar actividades que afecten a muchas personas, sabrá que las mejores decisiones son las que terminan brindando valor a la mayor cantidad de gente posible.'
Omar López, ya referido arriba, nos dice que los daños de la envidia 'se diagnostican con una evaluación de clima organizacional. Este estudio consiste en medir la comunicación interna, la calidad de los sueldos, las relaciones entre los mandos y la claridad de los objetivos comunes'. Cita a Martha Herrera, especialista en terapia racional emotiva, quien opina que “la envidia provoca conductas revanchistas y agresivas (pasivas o activas), y los empleados dejan de enfocar su energía en sus funciones”.'
Al parecer, no podemos sacarle la vuelta a la envidia, o nos domina como poseído o no falta algún acomplejado que envidie nuestra humilde humanidad.
Fuentes:
http://www.articuloz.com/negocios-articulos/liderazgo-envidia-e-idealizacion-5187940.html
http://www.unameseca.com/Ejercicios/Negocios/2005/13_laEnvidia/laEnvidia.pdf
http://www.karlabayly.com/2011/06/envidia-pecado-capital-para-tus-finanzas/
http://www.mounier.es/attachments/article/52/envidia.pdf
