HORIZONTE CIUDADANO
Movidos por la ilegalidad
Rosa Esther Beltrán Enríquez

Saltillo.- Muy pocos saltillenses saben que, según los expertos en jurisprudencia, es ilegal e inconstitucional que, sin una convocatoria previa, sin una amplia difusión en los medios de comunicación, y aún si ésta se hubiese realizado, los usuarios del transporte público deban pagar 2 pesos de “castigo”, “recargo” o “multa” por no contar con la tarjeta de prepago del Saltibús.

¿Por qué? De acuerdo a la fracción IV del artículo 31 de la constitución federal, y de todos los criterios que la suprema corte ha emitido en materia de tributación, en el caso del pago de derechos por un servicio público municipal, ninguna autoridad puede cobrar un derecho o una cantidad de dinero por el mismo concepto, sin bases ni fundamentos y con estricto apego a la legislación vigente.

O sea que, los dos pesos adicionales para aquellos que abordan unidades del transporte, no pueden cobrarse bajo el concepto de “recargo”, pues no se trata de una prestación o servicio de tipo contractual donde se puedan plasmar sanciones o recargos por determinado incumplimiento. El servicio de transporte funciona bajo un sistema de tarifas fijas, por ende, permitir a los concesionarios cobrar dos tarifas distintas, los coloca ante el hecho de que la tarifa aumentada, por no traer la tarjeta de marras, es ilegal, arbitraria y carece de todo fundamento legal previo y, en su caso, presente y válido.

Una multa es un acto administrativo formal; esto es, la persona debe ser abordada por una autoridad, ser notificada, informarle de qué se trata y cuáles son los fundamentos legales de la multa, y que todo conste por escrito; por ende, no puede tratarse tampoco de una “multa” el cobro adicional para quienes no tienen la tarjeta y el término “castigo” no existe en materia tributaria; el más parecido es “sanción”; pero igual, debe estar debidamente fundada y motivada, y en ningún caso puede ejecutarse en automático, como se pretende en el caso del transporte.

Igualmente, obligar a los usuarios a adquirir una tarjeta con un costo de 15 pesos debe tener un fundamento legal, previo y claro, y en este caso no ha sido así. Pero, suponiendo sin conceder que tal fundamento existiera, de todas formas el municipio comete una violación grave en materia de derechos: está cobrando de forma anticipada por un servicio que no está dando, que no está debidamente conformado (El Saltibús como empresa), y del que no están gozando los usuarios, esto es, las unidades nuevas.

Jericó Abramo anunció que en mayo llegarán las unidades del Saltibús. Entonces, ¿por qué debe la gente comprar las tarjetas cinco meses antes? La Suprema Corte ha enfatizado en reiteradas ocasiones que nadie puede cobrar de forma anticipada por un servicio, producto o derecho del que no goza el contribuyente. Esto es, los ciudadanos, ya, desde ahora, debieron erogar 15 pesos, por el “derecho” a subirse a unidades del año que no existen; son los mismos camiones chatarra.

Lo correcto hubiera sido, que la tarjeta de prepago se entregara a los ciudadanos, advirtiéndoles que en mayo deberían cubrir el costo correspondiente para activarlas; o bien, entregarlas de forma paulatina durante mayo, cuando ya circularan las anunciadas unidades nuevas.

Ahora las preguntas son: ¿para quién serán los 15 pesos?, ¿pretende Jericó “financiar” la campaña electoral? Hagamos cuentas: más de 435 mil usuarios del transporte público, multiplicado por el mismo número de tarjetas, uf, no es poco dinero ¿Por qué 15 pesos, y no 10, o 7?, ¿quién lo definió? ¿a dónde va ese dinero?

De manera que es ilegal e inconstitucional pagar los dos pesos de “castigo”, multa o recargo e igualmente ilegal e inconstitucional, es obligar a las personas a adquirir de forma anticipada las tarjetas de marras por un servicio que aún no están recibiendo (las unidades nuevas).

Si hubiera conciencia cívica los usuarios se defenderían y se ampararían contra la política arbitraria, insensible y “recaudatoria” de
Jericó.

Esta semana el multi anunciado módulo del Saltibús del Ateneo programado para abrirse el lunes a las 9 de la mañana para credencializar a los estudiantes, resultó también un fiasco. Lo abrieron a la 1 de la tarde porque el sistema no operaba, los estudiantes esperaron horas y horas para tramitar su tarjeta de prepago; lo curioso es que parece que algunos locutores de radio y TV tienen línea de seguir regañando a los usuarios; en efecto, escuché a Enrique Montaño de Milenio Radio amonestar a un estudiante del Tecnológico de Saltillo porque según él, todos lo dejaron para el último momento, disculpando implícitamente las fallas que finalmente son responsabilidad del ayuntamiento, el que no tiene disculpas de sus ineficiencias, ya que desde la semana pasada anunció la apertura del módulo Ateneo. Así que lo que se esperaba es que todo estuviera listo para atender, sin pretextos, a los estudiantes.

De nuevo, ¡fallaste Jericó, no vuelvas a alardear!

rosaesther80@gmail.com