Michoacán, la dificultad
Carlos Manuel Sabines
Ciudad de México.- En estos tiempos de noticias macabras por todos lados y a todas horas, aflora que a junio de este año, la empresa de calidad mundial, CFE, (Calderón y Elías Ayub dixit) lleva perdido el 75 por ciento de su patrimonio, con lo que se ubica en situación de quiebra técnica.
De los 449 mil 894 millones de pesos nominales que lo integran, 339 mil 434 millones se han perdido, por lo que solamente quedan 110 mil 460 millones de pesos y eso sin considerar el pasivo laboral derivado de las pensiones y jubilaciones no registradas, que representan una cantidad no cuantificada a cabalidad, pero que indudablemente es estratosférica.
Estos datos son más que suficientes para decretar que CFE al igual que Pemex están quebradas, y por tanto sujetas a la privatización indiscriminada que EPN pretende realizar en el muy corto plazo.
La iniciativa de Ley del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación-(INEE) aún no llega al Congreso de la Unión, para someterse al proceso legislativo respectivo (el próximo 26 es el plazo fatal para aprobarla, en su caso). Sin embargo, de acuerdo con la ley vigente, el IFAI sentenció que la SEP debe dar a conocer la evaluación de los maestros realizada en 2012.
¿Por qué la dependencia de Chuayfett se niega a dar a la publicidad esos datos?
En el sector educativo, resulta incomprensible que la SEP informe que se investigará quién o quiénes fueron los responsables de los 117 errores ortográficos que contienen los libros de texto que se empezarán a usar en unos cuantos días más. ¿Qué no hay una comisión de libros de texto gratuitos? ¿Para qué Chuayfett anda buscando a quién culpar bajo las piedras, si los tiene a la mano?
El abuso del poder y el uso indiscriminado de la información privilegiada que Sota llevó a cabo en su paso por la dependencia a su cargo en tiempos de Calderón, merecen que la Secretaría de la Función Pública aplique sanciones, a las acciones practicadas por esa señora. Así lo exigen analistas y expertos en el tema, amén de los ciudadanos atentos al probable y posible desvío de recursos públicos.
Por lo que se aprecia, la señora se sirvió con el cucharón a ciencia y paciencia de Calderón.
Datos del último informe de Coneval sobre Michoacán, indican que la situación de la entidad en general es caótica, no sólo desde tiempos de Vallejo y Reyna, sino de Godoy, Lázaro y anteriores. Algunos datos son los siguientes:
La población en pobreza es de 54.4 por ciento, contra el 54.7 por ciento que había en 2010: prácticamente igual. En pobreza extrema, aumentó de 12.6 a 13.3 por ciento; El rezago educativo disminuyó de 30.6 a 26.1 por ciento; la población con ingresos inferiores a un salario mínimo aumentó de 21.6 a 24.2 por ciento. En otras palabras, se infiere que el estado no es precisamente un edén en materia de bienestar de su pobladores.
Del sector agropecuario conocemos que el 90.7 por ciento del aguacate que se cultiva en México proviene de la entidad; que el 39.6 por ciento de la fresa nacional es de ese estado y que el 23.2 por ciento del limón proviene de Michoacán.
Sobre inseguridad, en 2007 se ubicó en la posición 13 del índice nacional de Inseguridad; en 2012, estaba en la posición última (el 32 del índice delictivo); en materia de extorsión ocupa el lugar 22, es decir, de los últimos; en secuestro el 32 y el lugar 20 en homicidios relacionados con el crimen. De aquí proviene la ingobernabilidad negada por tirios y troyanos.
En cuanto al PIB estatal, en 2008 era de 210 mil millones de pesos y en 2010, en 204 mil novecientos millones de pesos. Per cápita en 2008 era de 52 mil 813 millones y en 2010 en 51 mil 871.30, lo que representa una baja en el ingreso por persona.
No hay que ser economista, ni experto en seguridad, ni en ninguna especialidad para concluir que la situación del estado es caótica y que se requerirá de muchos años para resarcir la situación en que la dejaron gobiernos priístas y perredistas.
Uno de los detonadores del crecimiento económico del país, el mercado doméstico, sigue cuesta abajo. A diciembre de 2012, el índice estaba en el rango de 98.6 puntos y en julio de 2013, en 95.7 puntos , es decir, 2.7 puntos menos. Así ¿cuándo tendremos mejores guarismos en crecimiento?
Sagarpa informó que puso en operación la certificación de productos agroquímicos para garantizar que el aguacate de exportación cumpla con requisitos internacionales para su comercialización. Sin duda es loable la medida y que bien que el insumo citado sea motivo de preocupación, pero ¿y el café con la roya y otros productos del campo, dónde quedan?
Con medidas discrecionales como la citada, no es como se apoya al campo mexicano.
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