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1882 14 Julio 2015

 

 

Clouthier en su encrucijada
Ernesto Hernández Norzagaray

 

Mazatlán.- Creo que nunca antes un político sinaloense fue capaz de convocar tantas aspiraciones ciudadanas como Manuel Clouthier.

 Y no es que otorguemos poderes extraordinarios a este personaje, sino que con su victoria en el distrito electoral 05 modificó el esquema sucesorio sinaloense de 2016 y  al menos la aspiración de Clouthier de 2012 de ser  candidato independiente en el 2018 estaría legalmente dadas.

El esquema de competencia de los últimos procesos no existe más, en el análisis habrá que considerar la posibilidad de que Clouthier sea candidato independiente al gobierno del Estado o alguien con características similares.
Y qué mejor cuando existe un gobierno estatal consumido en el personalismo y los poderes fácticos con un desempeño que ofrece muchas dudas. Poco con lo prometido en campaña en 2010, un gobierno ciudadano, cercano a la gente. Atento a las principales causas de una sociedad agraviada y molesta con el gobierno por la inseguridad.

Hay un vacío que se llena mal con los tejemanejes de la grilla y los golpes bajos. Con el decrecimiento exponencial de los indicadores sociales. Hoy, la sociedad sinaloense está más segmentada entre ricos y pobres. Con menos esperanzas. Más ausente de la vida pública. Y, quizá por ello, una parte de ella se agarraría de una candidatura independiente como sucedió en Nuevo León, Jalisco y Sinaloa.  

Es ahí donde crece la figura de Manuel Clouthier, a quien primero lo vieron bien los vecinos del quinto distrito electoral y ahora saben más de él en Sinaloa y México. Ser el primer diputado independiente no es poca cosa.

Las circunstancias lo han puesto en la disyuntiva de buscar la gubernatura en el 16 o esperar en la Cámara de Diputados para ir sobre la candidatura presidencial en 2018.

Con su discurso irreverente y provocador ahora en caso de ir en busca de la postulación prácticamente no tomaría posesión del cargo electo porque tendría que empezar ya a conseguir el 2% de las firmas y copias de credencial de elector.

Que dicho de paso son aproximadamente 40 mil en todo el estado, en la mitad de las secciones electorales y eso exige una estructura organizativa que no parece tener más que el PAN y el PRI.

De ese tamaño es el candado que el Congreso del Estado le puso a quien aspire a ser candidato independiente a gobernador.

Claro, se puede y debe combatir la constitucionalidad de esa legislación, e ir a la Suprema Corte de Justicia para que sea ella la que lo resuelva y es una lucha jurídica que los aspirantes independientes deben dar para volver más accesible estos registros electorales.

Timming
En política el timming muchas veces es único e irrepetible por lo que exige un cierto grado de claridad y audacia. Si no es ahora, es nunca, rezan los tiempos electorales. Tendrá que tomar la decisión, antes de que empiecen a correr las candidaturas independientes, que termina en el mes de agosto.

Pero, ¿por qué agosto? ¿Cuando para esas fechas apenas se estará instalando la OPLE, no hay una convocatoria de elecciones y faltan varios meses para que inicie formalmente el proceso electoral con sus precampañas y campañas? ¿Por qué tanta diferencia entre candidatos partidarios e independientes?

Sin embargo, si el hoy diputado electo decide esperar el 18, no significa que este capítulo se haya cerrado para Clouthier y ahora esté haciendo maletas para buscar la escuela de sus hijos en el DF, cuando podría prestar servicios políticos valiosos a las candidaturas independientes dentro y fuera del estado.

Uno, convencer ya a una figura pública (o dos), para que se postulen independientes al gobierno del estado. Más todavía hacer un recorrido por los dieciocho municipios y explorar posibles candidaturas independientes a las alcaldías y a los veinticuatro distritos electorales estatales.

Vamos, generar hasta donde se pueda una red de candidatos independientes que tengan una plataforma común de reorganización económica, política y social del estado.

Sería en caso de esperar el 18 la antesala no sólo para el estado sino para todo el país y sería un excelente mensaje político. Cundiría con el ejemplo hacia una república de ciudadanos sin partido pero que podría derivar  en el mediano plazo hacia la formación de nuevas organizaciones políticas nacionales y estatales.

Como bien lo enseñan las experiencias europeas de los partidos Podemos y Syrisa, fruto de movimientos de irritados contra las políticas neoliberales europeas, que evolucionaron hacia la lucha por el poder político.

En México no falta irritación, lo que sobran son los mensajes antipolítica que hemos visto en los últimos años en los grandes movimientos sociales (Yosoy#132, las autodefensas, Ayotzinapa, etc.) y eso ha sido quizás, es un obstáculo para dar un giro al país.

En Grecia ya sucedió y en España eso definirá en noviembre durante las elecciones generales.

Claro, Sinaloa ni México, son Grecia ni España, sin embargo, tienen en común el descrédito de la política y la desconfianza en los políticos tradicionales.
Aquella desconfianza que tiene como denominador el “no se puede” de los gobiernos o la corrupción que es una forma de conservadurismo. Entonces, las condiciones anímicas están dadas y a flor de piel y lo único que se necesita es reforzar los liderazgos que emergen de las urnas.

Mensaje
Si Manuel Clouthier no mide bien el pulso social –como el  mensaje que reclama a los líderes partidarios y a los del Congreso del Estado– posiblemente dejara escapar una oportunidad para empezar a construir una candidatura fuerte.

Y es que ahora el tiempo, las ideas y el compromiso cuentan y mucho, son parte del timming.

No será lo mismo buscar una candidatura desde la Cámara de Diputados que hacerlo desde el movimiento social y lograr candidaturas independientes sin tantos obstáculos.

En uno se distinguirá poco del resto de diputados que buscará alguna nominación en su partido, mientras en el otro escenario es la posibilidad de construir un liderazgo nacional que le permita llegar fuerte en  2018.

Manuel Clouthier, si decide ir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para buscar cambios en la recién aprobada la ley electoral del estado, estaría apoyando doble: en Sinaloa y el resto del país.

Por ello, si esa demanda indispensable no va acompañada de otras acciones políticas perderá un tiempo precioso y posiblemente quedará igual la normativa electoral estatal.

Pero, más que eso, estamos ante un liderazgo emergente que tiene que ver el conjunto para no perderse en las minucias. Su distrito, el quinto, es aun con sus matices clasemedieros en muchos sentidos un microcosmos de lo que es el país. Gente molesta que se siente agraviada por el desgobierno. Con los políticos que terminan siendo nuevos ricos a costa de negocios privados con los recursos públicos. Que le agobia la inseguridad de las calles y desea gobernando a gente sensible a sus problemas.

Y quizá a gente como esta, lo que menos le preocupa es cómo habla el político, sino de lo que habla, lo que toca. Y es que sorprende la molestia en algunos periodistas por las expresiones golpeadas del hoy diputado y su llamado a la inteligencia para formular  preguntas.

Es decir, su llamado a prepararse para hacerlas y obtener las respuestas que necesitan no el periodista sino la sociedad, los lectores de opiniones de los representantes políticos.

En definitiva, estamos en un momento crucial que debemos de leer en clave de cambio político, ahora lo que falta es quién encabece estas luchas; si no lo hay estaríamos quizá perdiendo una oportunidad para dar un giro ciudadano a la política sinaloense.

 

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