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1098 10 Julio 2012

 

ANÁLISIS A FONDO
La vara con que mide Calderón
Francisco Gómez Maza

El presidente no mira la viga de su ojo
Y apoya a su archi enemigo AMLO

Ciudad de México.- Felipe Calderón Hinojosa, a cuatro meses para entregar la presidencia de la república, nunca vio ni verá la viga en su propio ojo; ahora, olímpicamente, magnifica la paja en el ojo de Enrique Peña Nieto.

El panista se agandayó la presidencia, en el 2006, “aiga sido como aiga sido”, e ingresó a Los Pinos por la puerta trasera del Congreso. Ahora acusa compra venta de voluntades políticas.

¿Cree usted que el señor Calderón tiene cara para cuestionar las elecciones de este primero de julio, que le dieron el triunfo al priísta Peña Nieto por poco más de tres millones de sufragios, pese a las acusaciones contundentes de la izquierda y a las muy tibias del hasta el primero de diciembre partido oficialista, de que lo que se impuso fue la inequidad penalizada por la ley?

Sobre todo, lanzar sus críticas luego de que él fue el primero que salió a cuadro en la televisión, el domingo 1 de julio, a reconocer el triunfo de Enrique Peña Nieto, luego de que el Instituto Federal Electoral anunciara las “tendencias” del voto recabadas por las encuestadoras, al final equívocas, y por el Programa de Resultados Electorales Preliminares. ¿Ahora se le olvida su festinación y pretende aparentar de demócrata?

Calderón se solidariza con su enemigo, que no adversario, Andrés Manuel López Obrador, como si buscara una segunda legitimación, como ex presidente que deja un muy pesado fardo de facturas impagadas, sobre todo en inseguridad pública y una economía boyante para los detentadores del capital y fracturada para los trabajadores, que se debaten entre el desempleo y la pobreza. Su elección en el 2006 fue tan cuestionada por el candidato izquierdista como la de Peña Nieto. Ahora acusa de inaceptable la compra de votos.

En entrevista radiofónica en el programa Enfoque, el saliente clamó, obviamente refiriéndose al candidato priísta: “Voy a evitar la palabra, para ser muy respetuoso, pero esta compra venta de voluntades políticas, así sea una o 10 o 100 o mil, es simplemente inaceptable, y hago votos porque la autoridad electoral rectifique de inmediato y la castigue si debe castigarla”, aclarando que “el tema de las tarjetas y las cuentas, y todo, es un tema que no digo que va a ser suficiente, no lo sé, para descalificar una elección con esas diferencias, pero que debe ser resuelto, por supuesto. “Oye ─le dijo a Leonardo Curzio, el conductor del programa─, no podemos quedarnos así nada más ‘qué tanto es tantito’ en eso.” (sic).

Pero defendió su elección como presidente por medio voto (el ya histórico y emblemático 0.56) de diferencia, avalada entonces, pues no era legal el recuento de voto por voto y casilla por casilla, por el Instituto Federal Electoral y sancionada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, recordando que “en 2006 se inventaron muchas cosas, mitos y tonterías que nunca se probaron”.

¿Y cómo puede asegurar Calderón que Peña Nieto compró voluntades políticas? ¿No serán mitos y tonterías inventadas por la izquierda, por él mismo y por el PAN?

Está más en su derecho López Obrador, sentido perjudicado en sus aspiraciones de ser presidente de México. Pero resulta más prudente que Calderón, ya que el tabasqueño aún estaba “sopesando” ayer las acciones legales que habrá de tomar su coalición en torno a la acusada inequidad de la competencia electoral. El jueves lo sabremos, como lo prometió ayer el izquierdista.

Difícil que prosperen las acciones legales que anuncia López Obrador ─nulidad o invalidez de las elecciones─, independientemente de que pudiese probar que el PRI compro “5 millones” de votos. El presidente consejero del IFE ya le entregó la constancia de mayoría al priísta. Y el proceso legal podría durar cinco años, como lo dijo un consejero electoral. Y si no durara ese tiempo, júrelo que lo harían durar. Pero Calderón no se mide.

A desfondo
El embajador en el Reino Unido, Eduardo Tomás Medina Mora, fue mencionado ayer en un reporte del periódico Excélsior como integrante del “equipo de transición” que acompañará a Peña Nieto rumbo a la presidencia de la república. Medina Mora fue el primer procurador general de Calderón. El coordinador del equipo sería, de acuerdo con la versión, Luis Videgaray, quien fuera coordinador de campaña. La versión de Excélsior está por confirmarse o desmentirse.

analisisafondo@cablevision.net.mx

 

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