DISPARATES
Blatterazo azo-azo
Armando Hugo Ortiz

 

Monterrey.- Fue un golpe seco entre quijada y oreja, el anciano quedó grogui, por suerte cayó contra las cuerdas y se amarró en clinch.  Lo salvó la campana.

En su esquina, más de 130 seconds le echaron aire con toallas, pusieron hielos en la nuca, le dieron a oler sales aromáticas. Fue inútil, cuando sonó la campana para el siguiente round, aventó la toalla.

En menos de una semana terminó la dinastía de la Fifa, que duró más de un siglo con cuatro santones: Jules Rimet, Stanley Rous, Joao Havelange y Joseph Blatter; convirtieron el deporte de futbol en espectáculo que genera ganancias multimillonarias.

Más que por una potencial escisión de los países europeos, Blatter renunció porque el FBI anda tras sus huesos, para mandarlo al menos a prisión domiciliaria.

El motivo visible es la corrupción, el trasfondo son los intereses económicos.  Quien parte y reparte se queda con la mejor parte, y durante varias décadas los directivos de la Fifa se sirvieron con la cuchara grande.

Mas no se pueden esperar cambios trascendentes en la Fifa, la Copa Mundial a celebrar en el 2018 en Rusia, y en Qatar en 2022 están muy cercanas, por muchos sobornos que se descubran no habrá cancelación. Andan rolando muchos billetes, ni con lavativa se pueden recuperar.

Irán a la guillotina dos o tres cabezas más, para apaciguar a quienes no quieran disciplinarse a los nuevos capos.

Nuestro país es uno de los borregos que más lana deja. Ya sabemos cómo se maneja el futbol, por qué va a todos los mundiales, pero estamos vacunado contra el escándalo de la corrupción. Pronto andará la mexicanada en el Ángel de la Independencia, la Macroplaza y la Fuente Minerva, festejando triunfos amañados de la selección.

O lloriqueando que no fue penalti.

a_hugo16@hotlmail.com