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1952 20 Octubre 2015

 

 

“El pueblo más feliz es…”
Lupita Rodríguez Martínez

 

Monterrey.- Con gran satisfacción comparto hoy las conclusiones generales del 15° Encuentro Internacional de Educación Inicial y Preescolar: Desarrollo Infantil Temprano, Neurociencias y Pedagogía del Arte.

En total se llevaron a cabo 27 conferencias, cinco paneles y 21 talleres dirigidos por 61 especialistas de 27 países, que propiciaron el debate y la reflexión con más de mil 300 educadoras y profesionales de los 32 Estados de la República Mexicana y de cuatro naciones de Latinoamérica.

Durante tres días no solamente se aportaron bases conceptuales, sino resultados de investigaciones y múltiples experiencias sobre la pertinencia de los tres temas del Encuentro y la complejidad para desarrollarlos.

Las conclusiones en cuanto al Desarrollo Infantil Temprano fueron:

° Para alcanzar su mayor grado de madurez y capacidad, el niño y la niña deben pasar por etapas que le van dotando de habilidades cada vez más especializadas, donde los procesos de estimulación y de aprendizaje y las experiencias de afecto y creación se constituyen en motores de su desarrollo.
       
° El desarrollo psicosocial del niño y la niña en cuanto a la constitución de la identidad, no puede comprenderse por fuera del contexto cultural, político y socio-económico en el cual viven sus familias y desarrollan sus procesos de crianza, cuidado y educación, dentro de las condiciones estructurales de diversidad, desigualdad, violencia, emergencias y renegociaciones permanentes entre los actores y sus contextos.

° Desde una mirada transdisciplinar y complementaria sobre el desarrollo integral del niño y de la niña, reconocemos el papel activo que ellos y ellas tienen en su propia construcción como sujetos sociales y en la construcción del mundo social y cultural que les rodea, a través del proceso de individualización y socialización que se da en las relaciones intersubjetivas en su vida cotidiana en la familia, en el Cendi y en la comunidad.

En cuanto al papel de las Neurociencias concluimos que:

° El cerebro constituye la base para el desarrollo de las habilidades cognitivas, creativas y comunicativas de las emociones, del comportamiento psicosocial y afectivo, del aprendizaje de normas y acuerdos sociales que regulan la vida en común, con base en una interacción generativa entre el sistema nervioso central, el cual goza de un altísimo grado de plasticidad.

° El sistema nervioso central ayuda a configurar las experiencias de los niños y de las niñas y sus capacidades para enfrentarlas, al mismo tiempo que las experiencias y los ambientes en los que se desenvuelven su vida, ayudan a desarrollar el cerebro y toda su base psicobiológica.

° El cerebro es organización, interdependencia y equilibrio. Es un “ecosistema” preparado para aprender. Por su gran plasticidad se modifica y reorganiza permanentemente, con su equipamiento innato para darle sentido al mundo, que lo mantiene siempre en búsqueda de comprensión y significados.

Respecto a la Pedagogía del Arte pudimos concluir lo siguiente:

° A partir del juego simbólico en el arte, el niño y la niña reconocen e integran la realidad, normas y valores, lo que les permite explicarse el mundo, tomar distancia y recrearlo. Incentivar el juego imaginativo a través del arte posibilita a los educadores ayudar a disfrutar de una niñez segura, fortaleciendo una relación consigo mismos, clave para su felicidad.

° El arte en todas sus expresiones (música, danza, teatro, dibujo, poesía, etc.) ayuda al desarrollo integral, ya que implica complejas relaciones cerebrales y mentales, expresión de emociones, desarrollo de relaciones y afectos, construcción de normas y valores, manejo de conflictos y creación de nuevas realidades que rompan los límites de lo que existe como posible.

Los tres días del 15° Encuentro reflejaron que existen sueños comunes en el sector educativo inicial y preescolar. Como diría José Martí: “El pueblo más feliz es el que tenga mejor educados a sus hijos, en la instrucción del pensamiento”. Por ello, educadoras y personal Cendi ponen todo su empeño para mejorar la calidad de vida de la primera infancia, con el fin de que tengan un desarrollo integral y cada mañana despierten con una sonrisa.

¡Otro mundo es posible!

 

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