HORIZONTE CIUDADANO
Comparecencia sin precedentes
Rosa Esther Beltrán Enríquez
Saltillo.- En un hecho histórico, sin precedentes, el Vaticano compareció ante el Comité sobre los Derechos del Niño de las Naciones Unidas; el objetivo de la comparecencia era responder las denuncias de pederastia por parte de religiosos y clérigos contra menores de edad. Organizaciones civiles europeas, estadounidenses y mexicanas enviaron al comité sus denuncias documentadas.
De México, 169 organizaciones civiles enviaron más de 200 expedientes. Según el documento, el Vaticano ha favorecido a los responsables de actos de abuso sexual en México, sostienen que “se pretende proteger la imagen de la Institución y sus ministros y evitar el escándalo público”. Los denunciantes solicitan que el asunto sea tratado como un crimen de Estado y que el Vaticano sea juzgado por la ONU, aunque ahora el Comité solamente evalúa, de manera que un juicio requeriría un proceso distinto.
Algunos datos de este proceso se remontan a 1990, cuando el Vaticano firmó el convenio de la Convención sobre los Derechos del Niño, posteriormente, en 2012 la ONU pidió información de todos los casos de abusos sexuales cometidos por clérigos o religiosos ya que el tema no había sido tratado en los informes de cada 5 años desde 1995 hasta 2011, a pesar de que para 2011 ya existían denuncias de pederastia.
Hasta el año pasado, el Vaticano respondió sin dar datos sobre el asunto ni sobre las acciones tomadas contra los responsables denunciados por abuso, sólo manifestaba que, en todo caso son las autoridades civiles a las que corresponde proceder, porque como Estado respeta la no intervención en los asuntos internos de los Estados.
Algunos líderes de organizaciones civiles reprochan al Vaticano el ser omiso y valerse de argumentos legales evadiendo dar respuestas concretas a las denuncias contra casos como los de Marcial Maciel y Nicolás Aguilar, quienes a pesar de las múltiples denuncias y del reconocimiento por parte del Papa Benedicto XVI de que Maciel cometió actos gravísimos e inmorales, pero no fue juzgado ni procesado por las autoridades y en cuanto a Aguilar las denuncias son por decenas, pero ha sido protegido por el Cardenal Norberto Rivera y otros jerarcas.
Por supuesto, no sólo la iglesia Católica mexicana presenta este problema, en muchos países del mundo han surgido denuncias, algunos son, Holanda, Italia, España, Alemania, Polonia, Inglaterra y Estados Unidos.
Aunque también habría que decir que no todos los obispos ocultan y protegen a los clérigos pederastas, recientemente, el Obispo de la Diócesis de Celaya, Benjamín Castillo, tras la detención del sacerdote católico Arturo Méndez Camacho, declaró: todo aquel que abuse de un menor tiene que ser castigado y separado de la vocación sacerdotal; también el cardenal Juan Luis Cipriani de Lima, Perú, afirmó: la pedofilia merece la mayor condena, en referencia a los casos de dos ex obispos uno acusado de pedofilia y otro por tener un hijo.
La sesión de la ONU en Ginebra fue dura y pesada y se prologó por 8 horas. Habrá que esperar hasta finales de mes para conocer las recomendaciones que emitirá el Comité de los Derechos del Niño tras evaluar las respuestas de monseñor Silvano Tomasi en la presentación del informe de la Santa Sede ante el Comité de las Naciones Unidas.
La organización civil mexicana Católicas por el Derecho a Decidir, que participaron activamente, manifestaron: sólo pedimos justicia y que se detenga el encubrimiento de los casos de pederastia; otras expresaron que el Comité de la ONU fue su voz, y lo hizo de manera excelente.
Sí, es un avance la realización de esta comparecencia del Vaticano ante la ONU, pero éste es sólo el comienzo, porque las ambigüedades y evasivas son la mampara de la impunidad, hay que llegar al reconocimiento de la responsabilidad institucional.
